Los inversores locales, y sobre todo internacionales, salieron masivamente de los acciones y bonos, haciendo añicos sus cotizaciones, y tanto el riesgo país, como los seguros contra default se dispararon y parecen no tener techo.
Los tiempos se aceleran, la incertidumbre política por las elecciones se exacerba y las preocupaciones por la economía local complican aún más el panorama para los activos argentinos.
Los inversores locales, y sobre todo internacionales, salieron este miércoles masivamente de las acciones y bonos, haciendo añicos sus cotizaciones, y tanto el riesgo país, como los seguros contra default se dispararon y parecen no tener techo.
En ese marco, el dólar mayorista escaló 3,7% a $ 43,95, su récord histórico nominal, por mayor demanda por cobertura, y una simétrica escasez de la oferta. También es cierto que la situación se agravó por un mal día en los mercados emergentes: en Brasil, por ejemplo, la divisa de EEUU subió 1,7%.
Lo realmente preocupante, según dicen en las mesas, es que se suponía que en abril el dólar iba estar más tranquilo porque llegaban las agrodivisas, con el refuerzo de las subastas del Tesoro. Por este motivo, esta suba es «estacionalmente preocupante».
«Si con temporada alta de exportaciones, tasa de interés de Política monetaria (Leliq) cerca del 70% y elecciones (aún) lejos estamos así, ¿qué nos esperará en julio?», se preguntan.
Casualidades o no, un operador recordaba que justamente esta semana se cumple un año del comienzo de la crisis cambiaria de 2018.
El analista Christian Buteler indicó a ámbito.com que «hay una salida brutal de activos argentinos. Se colocó mucha deuda durante los dos primeros años de gestión (de Cambiemos), y hoy no existe un mercado que pueda absorber esa salida».
El riesgo país saltaba 12% hasta los 962 puntos básicos (nuevo máximo en 5 años), y los títulos nominados en dólares, como el Bonar 2024, sufrieron caídas de hasta 6,2%, y ya rinden hasta casi 20% anual.
A la par, la bolsa porteña derrapó casi 4%, y borró así las ganancias (leves) anuales en pesos, mientras que las acciones argentinas en Wall Street se hundieron hasta 13,7%.
«Siguen las fuertes e indiscriminadas ventas de activos argentinos, principalmente del exterior, lo que impulsa al riesgo país, a raíz de las preocupaciones económicas y la extrema incertidumbre política», afirmó a este medio el economista Gustavo Ber.
Entre las primeras, analistas destacan que las últimas medidas anunciadas por el Gobierno para intentar frenar la inflación y reactivar el consumo no generaron ninguna señal positiva en los mercados.
«Todas las medidas que anuncia el Gobierno ninguna va en línea con bajar la incertidumbre y la preocupación que hay, que es que se acaben los dólares del FMI a partir de diciembre, y no se sepa con qué se van a pagar los vencimientos de deuda», enfatizó Buteler. «Todo se aceleró con las medidas de corte populista anunciadas por el Gobierno nacional y Provincial (congelamiento de precios y tarifas, descuentos en supermercados, etc.)», sostuvo.
Es por esto que los inversores se preguntan: «¿Para qué esperar a salir?». «Vendo ahora y punto», dicen.
«Si no hay credibilidad, los agentes económicos no creen y forman expectativas diferentes y totalmente desalineadas a las expectativas del Gobierno y sus políticas. Los agentes se protegen, adoptan comportamientos defensivos, la demanda de dinero cae, las presiones cambiarias e inflacionarias aumentan, y la política termina fracasando».
De cara a la contienda electoral, el mercado extremó la cautela ante algunas encuestas que arrojan malas noticias para el oficialismo, dado que colocan a Cristina de Kirchner al frente de la intención de voto de cara a un eventual balotaje.
«El problema sigue siendo que la imagen de Macri está por el piso y hoy no garantiza ningún triunfo. Queda claro que la política nos sigue diciendo que hay que mantenerse al margen de los activos financieros argentinos», resaltan especialistas de Delphos Investment.
Frente a la debilidad de la imagen del actual mandatario, el mercado sigue sin descartar una posible candidatura de la gobernadora bonaerense María Eugenia Vidal, por más que desde Cambiemos desechan todas las ideas alternativas al Macri.
«No descartamos ningún escenario dentro del marco económico actual. El problema es que en caso de llegar alguna de esas variantes (Vidal como candidata a presidente) lo va a hacer tarde y en un peor contexto»,opinaron en Delphos Investment.
En lo que respecta a la coyuntura global, para colmo de males, los mercados emergentes afrontan una jornada complicada este miércoles debido a «la salida de capitales, por lo cual se debilitan sus monedas, y aquí el correlato es el salto del dólar por el mayor beta», agregó Ber.
Los flujos internacionales están al mando en el corto plazo, por lo cual en un modo de pánico de liquidación de posiciones – al activarse stoploss – no se puede anticipar hasta dónde puede llegar el sell-off (la venta) de los activos argentinos, coinciden operadores en la plaza.