Hugo Ezequiel Argüello, un empleado de 21 años, fue condenado hoy a un año de prisión en suspenso, como autor del delito de lesiones graves. El legajo se resolvió a través de un acuerdo de juicio abreviado, rubricado por el fiscal Oscar Alfredo Cazenave, la defensora oficial Paula Arrigone y el propio imputado, y la sentencia fue dictada por el juez de control santarroseño, Carlos Matías Chapalcaz.
El hecho ocurrió el 4 de febrero pasado en el interior del hospital Lucio Molas. En el pasillo que va al Servicio de Pediatría, un hombre –quien estaba acompañado por su pareja– comenzó a discutir con Argüello, quien «sacó entre sus ropas un elemento cortante –un cuchillo tipo daga–, propinándole a la víctima tres puñaladas en su cuerpo, y ocasionándole heridas en el ventrículo izquierdo, en el abdomen (perforando el intestino delgado) y en una de sus piernas, quedando tendido en el piso, y debiendo ser intervenido quirúrgicamente de urgencia».
Además las partes convinieron la imposición de las siguientes reglas de conducta para el acusado por dos años: fijar residencia, someterse al cuidado de la Unidad de Abordaje, Orientación y Supervisión de personas en conflicto con la ley penal, y abstenerse de relacionarse de modo alguno con el agredido.
En principio, cuando Argüello fue formalizado, se le había imputado provisoriamente el delito de homicidio simple en grado de tentativa.