El Tribunal Oral Federal de La Rioja absolvió este viernes al ex jefe del Ejército, César Milani y ordenó su «inmediata libertad», en la causa que investigaba su presunta participación en delitos de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura militar ocurridos en esa provincia.
«Estoy de pie, no me van a quebrar», sostuvo el ex jefe del Ejército durante los últimos años de la gestión de Cristina Fernández de Kirchner al pronunciar sus últimas palabras en este juicio, por el secuestro y torturas sufridas por Pedro Olivera (ya fallecido) y su hijo Ramón en La Rioja, cuando el militar se desempeñaba como subteniente del Batallón 141 de La Rioja.
«Estoy tranquilo y sigo vistiendo con orgullo el uniforme de la Patria y ahora espero que la Justicia reivindique el buen nombre y honor de mi persona y mi familia», sostuvo Milani ante el Tribunal.
En ese marco, insistió en proclamar su inocencia en los hechos que se le imputan y, tras volver a sugerir que los procesos judiciales en su contra pretenden «ahogar el último intento de construir un Ejército nacional y popular», aseguró que, ahora, «otra vez hay un Ejército de rodillas, cumpliendo roles y objetivos secundarios que interesan a las potencias extranjeras».
«Espero que la Justicia reivindique el buen nombre y honor mío y de mi familia, pese a las difamaciones, las calumnias y las injurias», expresó Milani.
En su breve exposición ante el Tribunal Oral Federal de La Rioja, que realizó sentado, luciendo uniforme militar con insignias y leyendo un texto desde el banquillo de los acusados, Milani afirmó seguir creyendo «en una Patria grande, libre y soberana».
En este proceso, la Fiscalía, representada por Rafael Vehilis Ruiz y Virginia Miguel Carmona, pidió la semana pasada, en su alegato, 18 años de prisión para César Milani.
En tanto, la querella de la familia de Pedro y Ramón Olivera reclamó una condena de 20 años de prisión a Milani, y pidió la misma sanción para el ex juez federal Roberto Catalán y una condena de 12 años de prisión al teniente Alfredo Santacrocce, entre otros.
El debate oral y público por el secuestro y las torturas de las que fueron víctimas Pedro y Ramón Olivera en 1977 comenzó a desarrollarse el 3 de mayo pasado. Cuando ocurrieron esos hechos, el ex jefe del Estado Mayor General del Ejército revistaba como subteniente en el Regimiento 141 de Ingenieros con asiento en la provincia de La Rioja.