Greta Thunberg, ícono de la lucha contra el cambio climático, y la asociación Yanomami Hutukara, defensora de la biodiversidad de la Amazonia, han sido galardonados con el «Nobel alternativo» Right Livelihood, que otorga una fundación sueca.
Thunberg, de 16 años, obtuvo el premio «por haber inspirado y encarnado las reivindicaciones políticas a favor de una acción climática urgente conforme a los datos científicos». «Su comprensión de la crisis climática basada en la ciencia así como la falta de respuestas de la sociedad y los políticos a este tema llevaron a Greta Thunberg a dedicarse a la causa y a reclamar actos contra el cambio climático. Personifica la idea de que todos podemos modificar el curso de las cosas», escribió la fundación en un comunicado.
El movimiento de esta activista adolescente contra el cambio climático, llamado «Fridays For Future» («Viernes por el futuro») empezó hace un año, el 20 de agosto de 2018, cuando empezó, sola ante el Parlamento sueco, su primera «huelga escolar por el clima». Desde entonces el movimiento se ha ampliado considerablemente desde Suecia a Australia, pasando por Europa y Estados Unidos, gracias en parte a jóvenes activistas como ella.
El pasado viernes, más de cuatro millones de personas, según los organizadores, salieron a las calles en unos 160 países para una «huelga mundial por el clima» para pedir a los políticos en el poder acciones contra la catástrofe climática que auguran los científicos. El premio Right Livelihood también fue otorgado este año a la activista saharaui de los Derechos Humanos Aminatou Haidar por su combate por la autodeterminación del Sahara Occidental así como a la abogada china especialista en el derecho de las mujeres Guo Jianmeic.
Cada premiado recibe un millón de coronas suecas (unos 94.000 euros, 103.000 dólares). El premio Right Livelihood fue creado en 1980 por el germano-sueco Jakob von Uexkull, que fue eurodiputado ecologista, tras la negativa de la fundación Nobel a crear un premio para el medio ambiente y el desarrollo. Por esa razón la fundación que lo otorga lo considera el «Nobel alternativo».
La asociación Yanomami Hutukara y su conocido portavoz Davi Kopenawa, en tanto, recibieron el premio por la «lucha firme y determinada para proteger los bosques y la biodiversidad de la Amazonia, así como las tierras y la cultura de sus pueblos autóctonos».