Cinco días antes de dejar su cargo como director de la Agencia de Bienes del Estado (AABE), Ramón Lanús extendió por diez años el contrato para que el Tenis Club Argentino utilice un predio en Palermo.
Se trata de un terreno de casi 5000 metros cuadrados ubicado entre las vías del Ferrocarril San Martín, que en esa zona está elevado sobre unos centenarios arcos de ladrillo, entre las Avenidas Belisario Roldán y Figueroa Alcorta. La parcela ya funciona como parte del club.
Por el convenio que suscribieron la AABE con Martín Mariano Ascónape, suegro de Fernando De Andreis, el Tenis Club Argentino deberá pagar 345 mil pesos mensuales para poder utilizar el predio. El precio para la Concesión de Uso fue puesto por el Tribunal de Tasaciones de la Nación.
El club es uno de los más exclusivos, sino el más elitista, de la Ciudad de Buenos Aires y es imposible ingresar como socio sin recomendaciones de otros miembros. Sus salones están revestidos con boiserie, los vestuarios son de mármol y cuenta con jacuzzi.
«Que en tanto organización sin fines de lucro tendiente a la promoción de la práctica y los valores del tenis, el TENIS CLUB ARGENTINO ASOCIACIÓN CIVIL pretende fomentar la popularidad de dicho deporte», se explica en los fundamentos del acuerdo.
Según relata el portal El Disenso, Ascónape fue propietario de empresas offshore en Panamá y fue allanado por la construcción de un barrio privado en Exaltación de la Cruz.
Elisa Carrió es residente de ese barrio privado y según una versión que se hizo pública años atrás el terreno que alberga su casa habría sido un obsequio de la familia de Ascónape.
Meses atrás en otra controvertida licitación Estación Rosedal ofreció pagar algo más de 3,6 millones de pesos por mes para administrar los 15 locales en los arcos de Palermo, ubicados en Libertador y las vías del San Martín.