Un camión cargado con casi 300 costillares fue retenido ayer en la localidad rionegrina de Chichinales. La mercadería era transportada en un camión desde La Pampa hacia Cipolletti, sin las medidas de higiene y seguridad. El secuestro se realizó en la ruta 22 y alcanzó a 3.800 kilogramos de carne vacuna.
Según publicó el periódico La Comuna, el control de rutina se realizó frente al destacamento policial ubicado en el kilómetro 1117 de la ruta 22, donde la policía interceptó un camión Mercedes Benz Axor 1933 con semirremolque, sin chapa patente, que era conducido por un hombre de 37 años, oriundo de Cipolletti.
La carga no tenía la documentación y el equipo de refrigeración no funcionaba. Por este motivo, se convocó a personal del SENASA y se produjo la apertura del semirremolque. Se decomisaron 3800 kilos aproximadamente.
Los policías determinaron que el camionero infringió las reglas higiénico-sanitarias de elaboración e industrialización de todo producto de origen animal (Decreto 4238/68), y el SENASA dispuso que la carne fuese llevada a un frigorífico de la localidad de Coronel Juan José Gómez, hasta que se decida el destino final.