El senador por Juntos por el Cambio aparecía congelado en la pantalla. Pero cuando le dieron la palabra se pudo ver que tapaba una imagen con su propia fotografía, con una iluminación muy diferente a lo que daba su presencia física frente a la cámara de su PC.
El senador nacional de Juntos por el Cambio por la Provincia, Esteban Bullrich, participó este miércoles de la reunión de la Comisión de Asuntos Constitucionales del Senado, en la que se discutió incorporar modificaciones y avanzar con la firma del dictamen del proyecto de reforma judicial propuesto por el Gobierno, con la intención de llevar al recinto la iniciativa la semana próxima.
Sin embargo, Bullrich llamó la atención al usar una silueta suya que simulaba mirar a la pantalla con atención, congelado, lo que quedó en evidencia cuando le dieron la palabra y cambió por completo la iluminación de su cara. Además, la gigantografía personal se veía como si tuviera a alguien muy pegado a su espalda.
La sesión, transmitida en vivo, mostraba un mosaico con las cámaras de todos los senadores escuchando atentamente, entre los que estaba Bullrich. Sin embargo, la figura del ex ministro de Educación estaba congelada, en lo que parecía una foto.
De hecho, el senador de Juntos por el Cambio pidió la palabra y, cuando se la dieron, se ausentó por unos segundos de la pantalla. Cuando volvió a aparecer, su aspecto era totalmente diferente al que tenía antes, y se notaba por detrás suyo que estaba su foto en el fondo, como si fuera una sombra, o alguien que le soplaba al oído.
«Sigan el recuadro abajo a la derecha de Esteban Bullrich. Si puso una gigantografía suya para cuando no habla, es el Messi del Zoom», tuiteó el periodista Sebastián Iñurrieta con una breve captura del video.
Con la aparición de la pandemia y el trabajo en casa, con sus consecuentes reuniones en Zoom, surgió una propuesta de la cadena Ikea, que ofrece fondos de Zoom para distintas ocasiones. Estas propuestas de fondos para videollamadas tienen hasta 30 opciones que permiten mostrar todo tipo de ambientes alrededor, desde entornos profesionales a románticos o celebraciones de cumpleaños; pero hasta ahora a nadie se le había ocurrido poner una imagen de sí mismo.
