Dos hermanas gemelas indonesias, que fueron separadas cuando sólo tenían dos meses, se reencontraron después de 24 años gracias a un vídeo en la red social TikTok. El reencuentro puso fin a su separación por supersticiones locales y un episodio de violencia sectaria.
Elis Treni Mustika, una de las protagonistas de la historia es una joven «influencer» con miles de seguidores en las redes sociales. Su fa familia adoptiva la crió como hija única.
«Al principio no me lo creía. Pensé que era una estafa, alguien que solo tiene un aspecto similar al mio», relató la joven, dueña de una tienda de venta de maquillaje por Internet.
El reencuentro con su hermana se dio a partir de la publicación de uno de sus habituales videos en Internet. El video fue visto por un vecino de su hermana Trena, a quien le comentó que sus videos le habían resultado divertidos en TikTok. Para sorpresa de ambos, la joven le respondió que ni siquiera tenía perfil en esa red social.
«Cuando empezamos a hablar en octubre, ella conocía el nombre de mis padres e incluso tenía una foto de mi infancia. Ella sabía que había vivido en Ambon hace tiempo. Luego, me envió su perfil de Facebook y vi que eramos muy parecidas, especialmente cuando éramos niñas», contó Treni.
Las gemelas Elis Treni Mustika y Trena nacieron en 1995 en la ciudad de Ambon, capital de las centrales islas Molucas. Su familia había emigrado desde Java Occidental bajo un programa gubernamental para incentivar la repoblación de parte del archipiélago indonesio.
Debido a una serie de creencias y el miedo a que ambas enfermaran a la vez, un sabio anciano local recomendó criar a las gemelas por separado. Durante años los progenitores visitaron regularmente a los padres adoptivos de ambas.
En 1999 estalló la violencia entre las comunidades musulmanas y cristianas asentadas en las Molucas. El enfrentamiento duró más de cuatro años y se cobró la vida de al menos 5.000 personas y hasta 700.000 residentes se vieron desplazados.
Los padres biológicos de las gemelas se vieron obligados a huir a su natal Java Occidental pero solo pudieron localizar a Trena, mientras que perdieron el contacto con los padres adoptivos de Treni, quienes a su vez se trasladaron a Java Oriental.
Desde su hogar en la ciudad de Blitar, Treni, quien cambió su apellido a Fitri Yana, de la familia de adoptiva y desconocía la existencia de su hermana gemela, subía vídeos de su vida cotidiana a TikTok, donde contaba con unos 8.300 seguidores.
A unos 500 kilómetros al oeste, en la ciudad de Tasikmalaya, Trena, que intentaba encontrar a su hermana desde hacía dos años, logró contactar con el perfil de Treni gracias al comentario de su vecino.
Finalmente, el pasado octubre y tras más de dos décadas separadas las hermanas pudieron reencontrarse. Ahora ambas siguen documentando su día a día en vídeos publicados en las redes sociales.