Según Ecolatina en octubre la inflación mensual superó el 3% por primera vez desde que empezó la cuarentena. La consultora proyectó que esta cifra podría incluso incrementarse entre noviembre y diciembre del 2020. La inflación según estimaciones privadas cerraría en el 35% anual y para 2021 sería del 50% a nivel interanual. Según la consultora la aceleración se debe a la puesta en funcionamiento de motores de la economía que estuvieron paralizados por la pandemia del covid-19: el tipo de cambio, congelamiento de precios, salarios y tarifas.
«A pesar de que el dólar oficial siguió moviéndose como en los meses anteriores y que las tarifas de servicios públicos no sufrieron grandes aumentos, la suba de algunos precios regulados -léase combustibles-, el cierre de las principales paritarias y la actualización de Precios Máximos impulsaron a una inflación que volvió a los niveles pre-pandemia» sostuvo Ecolatina en su informe.
En cuando al tipo de cambio oficial, la consultora, recordó que avanzó lentamente mes a mes, y que entre las causas se encuentra el cepo que reprimió una parte de la demanda. Por otra parte las negociaciones salariales entraron en pausa y las tarifas de servicios públicos siguieron congeladas. Esto generó cierta tranquilidad en la suba de precios.
Según Ecolatina se pasó del 40% en el acumulado enero-octubre de 2019 a poco más de 25% en 2020. «En la búsqueda por atenuar el impacto regresivo de la cuarentena, el gobierno congeló los precios de varios alimentos y bebidas más algunos otros rubros de primera necesidad. En respuesta, aún luego de cierta actualización de Precios Máximos y Precios Cuidados, el IPC Consumo Masivo que elaboramos desde Ecolatina acumuló menos de 18% entre enero y octubre (diferencia de 8 p.p. en relación con el nivel general), concentrando una suba de casi 5% en los últimos tres meses» informa la consultora.
Por su parte las tarifas de electricidad, gas y agua subieron menos de 10% en lo que va del 2020, sin embargo, en el informe, Ecolatina sostiene que «es probable que los servicios públicos sufran alguna actualización en el corto plazo, aun cuando esta decisión tenga un impacto negativo para el oficialismo en las elecciones del año próximo».
Si se analiza los precios no regulados escalaron cerca de 35% entre enero y octubre del 2020. Los avances en electrodomésticos, equipos electrónicos e indumentaria, entre otros, motorizaron esta suba. «Como se observa, existe una importante heterogeneidad hacia el interior del set de precios relativos de la economía argentina. En consecuencia, aun cuando el dólar oficial y los salarios no se acelerasen en los próximos meses, habría algunas presiones sobre la inflación producto de las disparidades ya acumuladas» analizó Ecolatina.
También advierten que un escenario en donde el dólar y los salarios siguen calmos no es el más probable. «Luego de varios meses de batalla cambiaria, las Reservas netas perforaron los u$s5.000 millones a comienzos de noviembre y se acercan peligrosa y rápidamente a los mínimos de los últimos largos años (2015-2016). Por lo tanto, un mayor ritmo de ajuste del tipo de cambio oficial es un desenlace posible» explicó Ecolatina en su informe.
«Vale destacar que el impacto de los dólares paralelos y la brecha en el nivel de precios venía siendo marginal hasta septiembre. De hecho, las cotizaciones financieras o informales se dispararon en abril y mayo y la inflación perforó el 2% mensual por primera vez desde 2017 en esos meses, ayudada por las restricciones de la cuarentena. A la vez, tampoco se aceleró significativamente en los meses siguientes. Sin embargo, en octubre la brecha alcanzó los tres dígitos y habría empezado a impactar en la inflación, producto de problemas de abastecimiento de algunos bienes, sumado a la creciente incertidumbre que enfrentan las firmas a la hora de determinar sus costos de reposición» completó la visión.
Otro punto importante, según la consultora es que «se encienda el motor salarial en el corto plazo». Las menores restricciones a la producción de bienes y servicios están permitiendo reabrir las postergadas negociaciones colectivas, pautadas inicialmente para marzo, abril y mayo, pero suspendidas por la crisis sanitaria y su impacto negativo en la economía, anticipó Ecolatina.
Los salarios nominales mostrarán crecimientos en los próximos meses. Por caso, acumularon una suba de 18% entre enero y agosto de 2020 (último dato disponible), donde 14 p.p. corresponden al primer trimestre y el resto al período abril-agosto. En consecuencia, «hay espacio para reclamar actualizaciones nominales que aumentará el costo laboral de las empresas» explicó la consultora.
En el último punto analizaron las tarifas de servicios públicos. «Aunque el gobierno anunció que no habría ajustes en el corto plazo, y el año que viene es electoral, no se puede descartar algún tipo de actualización en este capítulo» explicó la consultora y agregó: «Sus precios están virtualmente congelados desde mediados de 2019, a la par que sus costos vienen en aumento. Además, el Palacio de Hacienda está intentando endurecer su objetivo fiscal del año próximo, llevándolo de -4,5% del PBI a -3,5%, y el gasto en subsidio sería una de las primeras partidas a recorta» explicaron.
En síntesis según las proyección de Ecolatina, la inflación se aceleró en octubre y probablemente se mantenga por encima del 3% mensual en noviembre y diciembre. De esta manera, la suba de precios acumularía cerca de 35% en 2020, y se ubicará por debajo del cierre de 2018 y 2019, cuando orilló el 50%. Sin embargo, «en el camino se habrían acumulado diversos desequilibrios y atrasos (precios relativos, dólar, salarios y tarifas) que posiblemente la “devuelvan” a la inflación a la zona del 50% en 2021, casualmente, el año electoral» cerró la consultora.