Un segundo sospechosos fue detenido hoy por el abuso sexual de una adolescente tras su fiesta de 15 años en el barrio Ludueña de la ciudad de Rosario, en el que se «constató fehacientemente la participación de cinco personas». Ante esa situación, a la carátula del caso -abuso sexual con acceso carnal agravado en la condición de la víctima- «se suma un agravante más que es la participación de dos o más personas».
El pedido de arresto fue realizado por el fiscal de la Unidad de Delitos Contra la Integridad Sexual, Ramiro González Raggio, quien dijo que, de acuerdo al avance de la causa y a las lesiones detectadas en la víctima, del ataque participaron «cuatro o cinco personas», lo que hasta ayer había puesto en duda. La renuencia a considerar el caso una «violación en manada» desató la ira de vecinos de la adolescente, que protestaron frente a la comisaría del barrio. La policía reaccionó reprimiendo a los manifestantes,
El segundo detenido en la causa, identificado por las iniciales P.E. y de 26 años, fue capturado esta mañana durante un allanamiento en las calles Tupac Amaru y Liniers. El sospechoso fue señalado como coautor del hecho, por lo que la justicia resolvió que permanezca detenido durante el proceso.
Ayer, la jueza rosarina Silvia Castelli ordenó la detención de otro acusado, Daniel G., de 18 años, a quien le atribuye el delito de «abuso sexual con acceso carnal agravado por resultar un grave daño a la salud física de la víctima en carácter de autor». Está formalmente detenido, con prisión preventica.
El hecho que se investiga se produjo durante la madrugada del último domingo, en la celebración del cumpleaños de quince de la adolescente. Según la reconstrucción realizada por la Fiscalía, ese día el acusado ingresó a la casa de la chica, ya que se conocían por una amiga en común, y le ofreció una bebida que él mismo llevó y que le provocó un desvanecimiento.
Ante esta situación, el agresor trasladó a pie y contra su voluntad a la adolescente hasta su propia casa, ubicada a pocos metros, donde, presuntamente junto a otras personas, la sometió sexualmente y le provocó graves lesiones, por las que debió ser sometida a una cirugía.
Cuando los familiares de la chica notaron su ausencia, comenzaron a buscarla por la zona y la encontraron aturdida en la vía pública, cerca de la vivienda del primer detenido.
Tras conocer el hecho, cerca de un centenar de vecinos del barrio Ludueña, donde vive la víctima, se reunieron frente a la seccional 12 para reclamar que además del acusado sean detenidos otros nueve jóvenes, a quienes también acusaron de haber abusado de la adolescente. Poco antes, un grupo de manifestantes se dirigió a la casa del principal acusado del ataque y le prendió fuego, por lo que debieron acudir los bomberos.
El fiscal Raggio sostuvo hoy que a partir de los informes médicos se constató que hubo «más de dos personas involucradas” en la violación, tras lo cual estimó que fueron «entre cuatro y cinco» quienes «participaron del hecho”.
En las últimas horas se sumó al grupo de imputados la madre de Daniel G., a quien se le dictó una orden de detención por presunto «encubrimiento».
En conferencia de prensa realizada hoy en el Centro de Justicia Penal, González Raggio dijo que «a raíz de la profundización de la investigación que se hizo ayer, podemos afirmar que hubo participación de cinco personas».
El fiscal informó que el segundo sospechoso fue entregado por su propia familia, luego de que les pidiera refugio para ocultarse.
En cuanto al resto de los presuntos implicados, González Raggio sostuvo que «serían dos hermanos del primer imputado (Daniel G.) y un tercero al que estamos buscando».
«Hay órdenes de detención para los partícipes e incluso para la madre del primer detenido. A esta mujer al principio no podíamos atribuirle el delito de encubrimiento por tratarse de su hijo, pero atento a que hay otras personas que no tendrían vínculo con ella, también hay una orden en su contra por encubrimiento», explicó.
El fiscal dijo que «el devenir de la investigación va modificando la plataforma fáctica y se va adaptando la teoría del caso que teníamos en un primer momento», y remarcó que «entre lo que pasó el domingo y hoy obtuvimos mucha información, que todavía no contamos oficialmente, pero podría ser que no todos hayan participado de la agresión directamente».
«Creemos que la víctima estaba alcoholizada y que el desmayo que sufrió fue producto de la cantidad de alcohol en sangre que pudo tener», explicó.