Un anciano colombiano de 104 años se convirtió en noticia al terminar una tesis doctoral que había iniciado tres décadas atrás. Lucio Chiquito Caicedo, nacido en Colombia en 1916, es un ingeniero que aprovechó el confinamiento provocado por la pandemia para terminar con la tesis de doctorado, que deberá defender en la Universidad de Manchester.
Chiquito tenía 27 años cuando, en 1943, ganó una beca para estudiar en la Universidad de Manchester. Allí viajó, en plena Segunda Guerra, y se graduó de ingeniero hidráulico en 1947. Sin embargo, pasarían 43 años hasta que empezó a trabajar en su tesis.
«Mi tesis consiste en determinar la cantidad máxima de agua que se puede sacar económicamente de un río para energía o para cualquier otra cosa», explicó el centenario ingeniero, que vive en Medellín.
📻#AlAire990AM I 🎓A los 104 años, el ingeniero civil, Lucio Chiquito Caicedo, presentó su tesis Doctoral a la Universidad de Manchester. La discusión del tema y las aclaraciones tardaron 25 meses. Nació en Cali en 1916, pero vive hace más de ocho décadas en Medellín. pic.twitter.com/wQl3pdJn8H
— RCN Radio Medellín (@RCN990Medellin) September 25, 2020
Este es un punto tan importante como el hecho de hacer la tesis con más de cien años de vida. Chiquito encontró una fórmula matemática a través de la cual se puede calcular el caudal óptimo que precisa un río para producir energía eléctrica, un desafío que la humanidad persigue hace dos mil años.
“El tiempo viene y va, y el tiempo perdido jamás volverá”, asegura el hombre cuya receta para la longevidad es bañarse con agua fría, comer mucha fruta y leer y estudiar todo lo posible. Conocido en Colombia como un empresario pionero de la igualdad de género, Chiquito hace planes para el futuro No solamente planea defender la tesis: también quiere profundizar en el estudio de la gramática del alemán, idioma que aprendió de pequeño.
En diálogo con El Colombiano, dio dos consejos. «Primero, aprovechen el tiempo porque el tiempo que se va ya no vuelve. Si antes era difícil ahora es más fácil con la tecnología y las oportunidades, así que mis mejores deseos para quienes quieren emprender el retador camino del estudio. El segundo es poder inspirar y dejarle un legado a las nuevas generaciones. Luchen por sus sueños porque todo es posible sin importar la edad».
