La Fiscalía General, a cargo de Máximo Paulucci, formalizó a Santiago Cazenave -oriundo de Catriló- por una fiesta clandestina que se desbarató durante la madrugada de Navidad, donde había aproximadamente 70 asistentes que estaban violando la normativa provincial que expresamente prohibe estos encuentros sociales en los términos de los artículos 205 y 239 del Código Penal.
En ese evento se secuestraron múltiples evidencias oportunamente en su domicilio que dan cuenta del encuentro clandestino y su magnitud. Además, se formalizó al mismo imputado por cuatro hechos más que configurarían los mismos ilícitos, a lo que se suma uno anterior.
La Defensa técnica de Cazenave estuvo a cargo del defensor José Mario Aguerrido. El Juez de control, Carlos Chapalcaz, después de oír las pretensiones de las partes, tuvo por formalizados todos los hechos y dictó la medida de prisión preventiva, por 45 días sustituyéndola por modalidad domiciliaria y ordenando el control de la Policía Provincial.
Sólo podrá egresar de su domicilio con fines estrictamente laborales de 18 a 2 horas.
ANTECEDENTES
Santiago Cazenave se encuentra cumpliendo con una condena en suspenso por un delito contra la propiedad. En 2018 fue condenado por la Justicia de General Pico a tres años en suspenso por encubrir el robo de agroquímicos ocurrido en un campo de Relmo.
A mediados de julio pasado, pocos días antes que se inicie el primer brote de Covid-19 en la localidad, Santiago Cazenave fue acusado por la Justicia provincial por organizar una fiesta en el bar «Apolo», de la que participaron más de 30 personas.
En ese momento, los fiscales Máximo Paulucci y Natalia Urruti acusaron formalmente a Cazenave por incumplimiento del artículo 205 y 239 del Código Penal, por estar sospechado de ser el organizador de la fiesta clandestina que se realizó en su propio local.