Un ex policía (54 años) fue detenido en esta localidad por personal de la comisaría local luego que su pareja (58) lo denunció por «privación ilegítima de la libertad», «lesiones» y «amenazas». Ayer, la Justicia le formalizó la causa y le dictó 90 días de prisión preventiva. Se realizaron allanamientos y se secuestraron un arma de fuego, municiones y un teléfono celular.
Fuentes oficiales indicaron que el martes a la noche una mujer se presentó en la comisaría departamental y radicó una denuncia contra su concubino, un policía «cesanteado» hace un tiempo de la fuerza de seguridad, dijeron los voceros.
La víctima expuso que el hombre la mantuvo cautiva cuatro días en la casa donde convivían. En ese lapso, denunció que fue golpeada y amenazada con un arma de fuego, publicó el diario La Arena.
El martes a la noche, el agresor se fue de la localidad, aparentemente de vacaciones a Córdoba y fue allí que la mujer pudo salir y radicar la denuncia. En el hospital local se constataron lesiones en diferentes partes del cuerpo de la vecina.
El miércoles a la tarde, la Justicia libró una orden de allanamiento en la casa del denunciado. Cuando la policía buscaba elementos probatorios arribó el hombre y fue detenido. «Estaba en Lonquimay visitando familiares, aún no se había ido a Córdoba», manifestaron las fuentes oficiales.
FORMALIZADO
También se le secuestró el auto. Ayer a la mañana, la policía requisó el vehículo y allí se hallaron municiones de un arma de 9 milímetros y un teléfono celular. Más tarde, un familiar entregó voluntariamente el arma (una pistola) con la que habría amenazado a la mujer.
Tenía el registro vencido, con lo cual también se le iniciaron actuaciones judiciales.
Durante la tarde de ayer, vía Zoom, se realizó la audiencia de formalización contra el ex policía. La fiscalía estuvo representada por Walter Martos. El juez de control santarroseño, Carlos Chapalcaz, le dictó la prisión preventiva por 90 días y el acusado quedó alojado en la comisaría local.
