En el Gobierno no niegan su preocupación por la escalada de los contagios -este martes registró un nuevo récord de 27.001 infectados- y la fragilidad del sistema de salud tanto público como privado. Por esta razón, en la Casa Rosada se llevaron a cabo reuniones permanentes con diferentes miembros del Gabinete nacional para monitorear la situación.
Justamente, este martes al mediodía se llevó a cabo una reunión que presidió el jefe de Gabinete de Ministros, Santiago Cafiero, los ministros de Salud, Carla Vizzotti, de Seguridad, Sabina Frederic y de Transporte Mario Meoni. Este encuentro tuvo como objetivo determinar medidas en materia de transporte por el aumento de casos de Covid-19.
En tanto, al final del día, el jefe de gabinete convoco nuevamente a la ministra de Salud, Carla Vizzotti, el ministro de Defensa, Agustín Rossi, el de Turismo y Deportes, Matías Lammens; la ministra de Seguridad, Sabina Frederic, la vicejefa de Gabinete, Cecilia Todes, el ministro de Trabajo, Claudio Moroni, de Producción, Matías Kulfas, de Educación, Nicolás Trotta, la asesora presidencial Cecilia Nicolini y el secretario general de la Presidencia, Julio Vitobello. El motivo: evaluar la evolución de los contagios y eventualmente que medidas implementar.
Al respecto, hay versiones que indican que a partir del viernes podrían establecerse medidas más severas.
Algunos estiman que se establecería un cierre a partir de las 18, similar a lo implementado en algunos países europeos, en una medida que tiende a preservar el grueso de la actividad. En tanto, los especialistas le aconsejaron este lunes al Gabinete nacional que sería necesario establecer una cuarentena parecida a la implementada en marzo del año pasado.
El presidente, Alberto Fernández, se sumó de manera virtual a la reunión que duró más de dos horas.
La posibilidad de implementar más restricciones lleva a que, este miércoles se desarrolle una reunión de gabinete económico donde se analizarán las medidas de apoyo para los sectores que se verán afectados por las mayores restricciones. Al respecto, Ámbito pudo saber que se estudiará la implementación de un IFE acotado.
El Gobierno quiere mantener la presencialidad en los colegios ya que, según los expertos, no constituyen focos de contagio. Aunque reconocen que existen fuertes presiones incluso dentro del Frente de Todos para que se vuelva a la educación virtual como, por ejemplo, lo señalaba Leopoldo Moreau en C5N.
Justamente la provincia de Buenos Aires apoya la idea de establecer una cuarentena más dura y no deja de reclamarlo públicamente. Este martes, el jefe de gabinete bonaerense Carlos Bianco, admitió que “nuestra posición era hacer un cierre fuerte durante 15 días para reducir sustantivamente el aumento de casos». Por su parte, el ministro de seguridad, Sergio Berni también aseveró en declaraciones radiales que se necesita “una cuarentena dura”.
La postura imperante en la provincia de Buenos Aires es que si no se toman medidas más restrictivas de todas maneras se terminará afectando al sistema productivo. Más allá de que el sistema sanitario está casi al límite.
Las dudas del Gobierno nacional en establecer una cuarentena más estricta pasan por la falta de fondos existentes para asistir a la población afectada como asimismo el cansancio que se observa en la gente.
“El velorio de Maradona, el vacunatorio Vip, la demora en la vacunación, son factores que debilitaron la palabra oficial”, explican algunos intendentes que no se muestran muy dispuestos a “ser muy estrictos con los controles a los vecinos”.
Desde el Gobierno también hay malestar con los gobernadores, ya que a casi una semana del DNU 235/202 anunciado por el presidente Alberto Fernández el miércoles pasado, desde las administraciones provinciales no se han tomado medidas. El artículo 17 del mismo, permite a cada jurisdicción establecer restricciones temporales y focalizadas, dependiendo de la situación sanitaria.
Es que, aunque no lo reconozcan públicamente, numerosos dirigentes temen establecer medidas que no sean acatadas por la sociedad.
Prueba de esto es que uno de los temas que se analiza en las diferentes reuniones del gabinete es “la falta de aplicación de medidas restrictivas por la pandemia de algunas intendentes o gobernadores”.
Por el momento, a las medidas ya anunciadas, el gobierno avanza en intensificar los controles y reducir la circulación en el transporte, aunque según los expertos, eso no sería suficiente.
Justamente el ministro de Transporte ratificó que se controlará que se cumpla lo dispuesto desde el año pasado “como la ventilación de unidades tanto de trenes como de micros”. El funcionario afirmó que buscaran que implementar “acciones complementarias, como la fijación de ventanillas, para que no se puedan cerrar y que más allá de la lluvia o no lluvia, queden abiertas de manera permanente”. Esta afirmación al menos resultó extraña ya que la mayoría del transporte público tiene ventanas fijas pues cuentan con aire acondicionado.
Por esta causa, se estima, que el titular de la cartera de Transporte comentó que las medidas “están consensuadas con las empresas y van a estar en funcionamiento a partir de que cada una de ellas pueda ir haciendo las adecuaciones necesarias”.
En la Rosada sostienen que esta semana se “analizara permanentemente la situación sanitaria” y de ser “necesario” se podría tomar más medidas. El propio Alberto Fernández cuando anunció las nuevas restricciones lo anticipó.
Este miércoles la ministra de Salud de la Nación, Carla Vizzotti, brindará su habitual conferencia de prensa y se estima que brindará un detalle del avance de la vacunación.
En la reunión de este miércoles de gabinete económico se analizarán medidas económicas y apoyo para los cierres focalizados. El Gobierno quiere mantener la presencialidad en los colegios ya que no constituyen focos de contagio, argumentan. Asimismo, admiten que hay otros sectores dentro de la misma fuerza que querrían que la educación sea virtual.
