Finalmente, y tras un año de demora por la crisis del coronavirus, Tokio 2020 levantó el telón un año después de lo pautado.
Estos Juegos Olímpicos no sólo pasarán a la historia por ser los de la pandemia, sino también por ser los más costosos, con un gasto récord que creció aún más como consecuencia del aplazamiento, de acuerdo a un estudio de la Universidad de Oxford.
El cálculo excluye el costo de la deuda, el futuro gasto de las instalaciones deportivas tras la clausura y la inflación.
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Según Bent Flyvbjerg, autor principal del informe, que releva Palco23, Tokio gastará u$s 15.840 millones, superando a los Juegos de Londres 2012, los más caros hasta la fecha con u$s 14.950 millones.
Y más que duplica el gasto inicialmente previsto, ya que los responsables aseguraron, cuando la sede fue elegida en 2013, que el evento sería de u$s 7300 millones.