El subsecretario de Salud Mental y Adicciones, Martín Malgá, confirmó que durante la pandemia “bajamos los índices de suicidios” en La Pampa. Detalló que se multiplicaron las demandas “por cuestiones de salud mental”, pero se ofrecieron “nuevos servicios desde el punto de vista de accesibilidad, aumentando cinco veces la cantidad de dispositivos”. “Los cuadros de angustia fueron los más recurrentes”, reveló el funcionario.
“Nos preocupó mucho ésta temática; tenemos un sistema muy riguroso para la identificación de estos episodios. Los años 2020 y 2021 fueron de descenso. En el 2018 hubo una tasa alta, con 13 puntos, que se ubica sobre la media nacional. En el 2020 hemos bajado a 12 puntos. Y en este año la tasa es de 8 puntos”, dijo Malgá en la ronda de consultas con los legisladores provinciales, durante el tratamiento del Presupuesto 2022.
“En La Pampa, al ser una población chica, un grupo reducido de episodios mueve mucho la tasa. Entonces la forma de evaluar esto en nuestra provincia es hacerlo con una mirada histórica”, señaló.
El funcionario contó que Salud tiene un equipo para registrar “los intentos de suicidio”. “Somos –destacó- la única provincia que tiene este equipo. Hemos elaborado estrategia de enlace, por donde se recibe la notificación para que se vaya a ver a la persona y para que se evalúe la complejidad de la situación”.
“¿La pandemia no ha aumentado los suicidios?”, insistieron los legisladores. “Durante la pandemia bajamos los índices de suicidios en La Pampa. Tiene que ver también con la política que implementamos para prevenir, mientras que en el resto de las provincias ha aumentado”, respondió Malgá.
También contó que la medición se hace a partir de la “distribución etaria de dos grandes grupos: uno es a partir de los 17 años hasta los 35, y otro grupo a partir de los 50 en adelante, hasta los 65 años”, dijo Malgá y reveló que “en 2018 hubo 46 personas que se quitaron la vida; en 2019, 45; en 2020, 43 y en 2021, 32”.