La Convención Constitucional chilena entregó este lunes, en su ceremonia de clausura, la propuesta de Nueva Constitución al presidente Gabriel Boric, quien firmó el decreto para someterla a plebiscito en septiembre y que la ciudadanía decida si deja sin efecto la carta magna impuesta hace más de cuatro décadas por la dictadura cívico militar de Augusto Pinochet (1973-1990).
«Ha tenido que pasar mucho, muchos sacrificios de vidas para poder discutir una Constitución que nazca de un debate democrático”, dijo Boric en el antiguo edificio del Congreso en Santiago, tras recibir el texto redactado durante un año por los 154 miembros de la Convención Constitucional, que quedó disuelta tras el acto.
El inédito proceso constitucional, democrático, paritario y con la participación de los pueblos originarios, fue resultado de un acuerdo entre los partidos políticos tras las históricas y masivas manifestaciones iniciadas en octubre de 2019 para denunciar la desigualdad enraizada en la actual Constitución de 1980 y exigir un nuevo modelo de Estado que garantizase la salud pública, la educación universal de calidad y una mejora de las pensiones.
«Tenemos que sentirnos orgullosos que en el momento de crisis más profunda (…) que ha vivido nuestra patria en décadas, los chilenos y chilenas optamos por más democracia y no por menos», dijo Boric, un joven mandatario de izquierda que asumió en marzo pasado y que era diputado en el momento del estallido social de 2019.
El 25 de octubre de 2020, mediante un plebiscito nacional, se aprobó por casi el 80% la propuesta de redactar una nueva Constitución y, unos meses después, en mayo de 2021, se eligieron los convencionales. La Convención se instaló el 4 de julio.
«Será nuevamente el pueblo el que tendrá la última palabra sobre su destino”, cerró Boric tras firmar el decreto que convoca a un plebiscito con voto obligatorio el 4 de septiembre y que consultará a más de 15 millones de electores si «Aprueba» o «Rechaza» la nueva carta fundamental.
El esperado acto, cargado de simbolismo, comenzó a media mañana con el ingreso a la sala principal del exCongreso Nacional, sede de la constituyente, de la presidenta de la Convención Constitucional, María Luisa Quinteros, y el vicepresidente, Gaspar Domínguez, con la propuesta de Nueva Constitución en sus manos, mientras los convencionales e invitados aplaudían.
La propuesta de nueva Constitución contiene 388 artículos en 178 páginas.
Quinteros, al inicio de la ceremonia, saludó en todas las lenguas de pueblos originarios presentes y dio inicio a la sesión, Que comenzó con la entonación del himno nacional chileno por un coro de niños y jóvenes.
El primero en tomar la palabra fue el vicepresidente Domínguez, quien hizo un recuento del proceso constitucional, de los errores y virtudes, pero valoró el nuevo texto que le entregarán al presidente Boric.
Domínguez dijo que pase lo que pase en el plebiscito que aprobará o rechazará la propuesta de nueva Constitución, Chile ya cambió y remarcó que no se podía volver atrás.
“La Constitución perfecta no existe, esta propuesta no es una varita mágica, pero si es una mejor caja de herramientas para avanzar en soluciones”, dijo.
“Amar la patria es más que amar los emblemas que lo componen. Escribir una constitución democrática, es un profundo acto de patriotismo”, agregó.
Finalizó su discurso invitando a los chilenos a leer la propuesta de nueva Constitución y leyendo el nuevo preámbulo: “Nosotras y nosotros, el pueblo de Chile, conformado por diversas naciones, nos otorgamos libremente esta Constitución, acordada en un proceso participativo, paritario y democrático”.
A su turno, Quinteros, quien dijo que «fue un año de intenso y riguroso trabajo, desarrollado por un órgano elegido democráticamente, por primera vez paritario, con una representación y diversidad poco antes vista en nuestra historia”.
Y recordó que esta Convención termina con la redacción de “la primera Constitución paritaria del mundo”, qué además fue redactada por un órgano que fue presidido por dos mujeres.
Igualmente reconoció que es una constitución “perfectible, y esperamos sea el piso mínimo que contribuya a consolidar una sociedad con mayor equidad, fundada sobre fuertes bases éticas”.
“Esta propuesta constitucional, que hoy entregamos, está llamada a convertirse en la base del país más justo con el que todas y todos soñamos. Una Constitución justa para Chile”, dijo.
Luego la presidenta y el vicepresidente de la Convención firmaron las 10 copias de la propuesta de nueva Constitución, que serán entregadas al Senado, Cámara de Diputados, Corte Suprema, Tribunal Constitucional, Contralor General de la República, dos copias a la Biblioteca Nacional, dos copias al Archivo Nacional y al presidente Boric.
Después de la firma, el presidente Boric con la banda presidencial ingresó a la Sala entre aplausos para recibir una de las copias de la propuesta de nueva Constitución.
El decreto del plebiscito fue firmado por Boric y los ministros del Interior, Izkia Siches, y el secretario general de la Presidencia, Giorgio Jackson.
Al acto asistieron 600 personas, entre convencionales, invitados y prensa, quienes tuvieron que ingresar con estrictos protocolos administrativos y sanitarios, por un pasillo que tenía banderas chilenas y de los pueblos originarios.
Carabineros realizó desvíos de tránsito vehicular en el centro de Santiago, además de control policial en los alrededores del exCongreso Nacional, sede de la Convención Constitucional, y el Palacio de La Moneda.