El operador judicial de Mauricio Macri, Fabián Pepín Rodríguez Simón, prófugo hace 625 días y que se encuentra en Uruguay desde que la jueza María Servini lo llamó a indagatoria en el marco de una causa que investiga las presiones a los dueños del Grupo Indalo, intentó victimizarse al asegurar que es un «perseguido político». También le respondió a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, quien mostró este miércoles un obituario del diario La Nación de mayo de 2021 donde Rodríguez Simón envía sus condolencias por la muerte de Manuel de Abrelleyra, cuñado del fiscal Diego Luciani: «Publiqué un aviso saludando a su esposa e hijos, no sabía de la existencia de Luciani y menos que estaba casado con la hermana», argumentó.
«(Manuel de Abrelleyra) era muy cercano a mí, desarrollé una gran relación profesional. Fue presidente de Walmart y DirecTV, fui abogado de ambas empresas. Murió cuando estaba en Uruguay y publiqué un aviso saludando a su esposa e hijos», precisó el operador macrista en una entrevista con Radio Perfil, al tiempo que aclaró desconocer la relación que unía a Abrelleyra con Luciani. «En el aviso saludo a Manu y su familia. Hay una teoría de seis grados de separación», insistió.
Discurso de CFK
Consultado sobre el discurso que Cristina Fernández de Kirchner pronunció este martes desde su despacho en el Senado luego de que los jueces Tribunal Oral Federal 2 le denegaran un pedido para ampliar su indagatoria, dijo que «fue el de alguien desamparado y mal asesorado», con una «comunicación no verbal agresiva y negativa» que hacía «imposible entender a qué se refería».
Este martes, CFK mencionó a Rodríguez Simón como «el artífice» de la designación por decreto a dos jueces de la Corte Suprema de la Nación—Horacio Rosatti y Carlos Rosenkrantz— y, en paralelo, de la persecución a la ex Procuradora de la Nación Alejandra Gils Carbó «con amenazas sobre sus hijas».
También recordó que Rodríguez Simón «es el único que utilizó los fueros del Parlasur» para eludir a la justicia. «Y no es peronista, es de ustedes. Ninguno de nosotros se profugó cuando nos persiguieron, nos amenazaron y nos encarcelaron», le recordó a la oposición mientras mostraba una foto de campaña del operador judicial junto a la fundadora de Juntos por el Cambio, Elisa Carrió, y la diputada opositora, Mariana Zuvic, con un cartel que decía que ‘llegaba el macrismo para terminar con los privilegios'»
Rosatti y Rosenkrantz
Lejos de admitir las irregularidades mencionadas por CFK, Rodríguez Simón respondió sobre Horacio Rossatti y Carlos Rosenkrantz: «Propuse antes del 10 de diciembre de 2007, como alternativa a un equipo que estaba trabajando, y para sorpresa mía fueron Rosatti y Rosenkrantz. Por currículum y trayectoria creí que eran los mejores candidatos para los cargos a ocupar. También, compartiendo mi asombro, coincidió Mauricio Macri que había impuesto como exigencia que se elijan candidatos que él no conociera».
Sobre las amenazas a Gils Carbó, aseguró que «es una falacia montada sobre un momento triste y personal, armado por los servicios de inteligencia. Nunca me dediqué al derecho penal y no tuve que ver con ella. Era un tema que no estaba en ninguna de mis andariveles ni tampoco me importó».
«Un día me llama un primo de mi exmujer desesperado porque necesitaba hablar conmigo. Ella me dice que no lo atienda que está loco, tiene un tema psiquiátrico. Accedí para que no se sienta menospreciado y él me dice que trabajaba con Gils Carbó, a quien la habían procesado hacía dos días. Me comenta que ella va a renunciar y que se iba a candidatear, además de ser el fiscal más leal del macrismo», continuó el operador judicial.
Fue entonces que «le contesto que no me importaba el tema y que nada tenía que ver. Me acordé tres años después por lo grotesca que fue la situación, le digo a mi expareja y me responde que me advirtió. Gabriel De Vedia se llama, actualmente es camarista». Esto pasó entre 2017 y 2018, precisó Rodríguez Simón. «Si yo hubiera amenazado, él como fiscal tenía la obligación de denunciarme o de decírselo a Carbó. Tres años después aparece y dice que yo dije que si quería que se acabe la persecución hacia ella y las hijas tenía que renunciar».
Prófugo
Respecto a su permanencia en Uruguay, donde se encuentra prófugo eludiendo la justicia argentina, respondió: «El derecho humanitario al refugio, está entre los derechos humanos. Es un derecho, no una obligación. Nace cuando se dan determinadas circunstancias».
«Tengo temores fundados de que si vuelvo, por mis opiniones y lo que se me imputa, pueda poner en peligro mi seguridad personal. Tengo el derecho de pedir la protección internacional», insistió el operador macrista.
«Los kirchneristas me tildan del prófugo, yo estoy libre para la justicia internacional. Es un recurso que puede pedir cualquier perseguido político. Ayer Cristina dijo que no estoy extraditado porque invoqué los fueros del Parlasur a los cuales renuncié. Que ella no pida la protección es otra cosa, quizá no se siente perseguida», concluyó.