El hecho ocurrió el 31 de diciembre en la localidad cordobesa y acusan al exjugador de Boca de haber atacado a golpes de puño a un trabajador. El presunto agredido se presentó como querellante particular y solicitan que se lo impute por lesiones.
El motivo del enfrentamiento se habría dado por un hecho de “folclore” entre Boca y River que terminó pasando a mayores. El denunciante, conocido como José Gustavo Gauna, realizó el descargo ese mismo día en la Unidad Judicial de esa ciudad, según pudo confirmar Doble Amarilla.
Según el relato de Gauna, ese día estaba acompañado por su pareja y sus dos hijas menores de edad, cuando se cruzaron con Ledesma. Asegura que cuando el exjugador notó el escudo de River -que el hombre tiene tatuado en el brazo-, comenzó a cantar canciones de cancha de Boca contra River, a lo que respondió con bromas y risas.
Sin embargo, el presunto agredido cuenta que las cargadas fueron subiendo de tono y Ledesma, junto a sus acompañantes, comenzaron a insultarlo y a agredirlo con golpes de puño. Además, Gauna denuncia que también insultaron a su pareja en frente de las niñas, una de las cuales sufrió un ataque de pánico debido al enfrentamiento.
“Comenzaron a golpearme a mí en la cara hasta tirarme al piso y luego seguir golpeándome mientras estaba en el piso. Me pegaron golpes de puño y patadas debajo de la nuca, debajo de mi oreja derecha, en la sien de mi lado derecho, en la mandíbula del lado derecho y a la altura de mi riñón izquierdo. Además, al caer contra el cordón de la vereda, sufrí el impacto de mi columna en el área cervical contra el concreto”, reza la declaración oficial.
Ledesma, oriundo de La Falda, Córdoba, actualmente se desempeña como entrenador de la octava división de Boca. El caso tomó gran relevancia en los medios de comunicación de la provincia y suma un nuevo capítulo por la actualización judicial.