La ciudad de Lincoln, en el noroeste de la provincia de Buenos Aires y a 320 kilómetros de la Capital Federal, se prepara para reditar su tradicional Carnaval Artesanal los próximos 10, 11, 12, 18, 19, 20 y 21 de febrero, con siete noches de desfile a todo brillo y los shows de La K’onga y La Beriso.
Durante el mes de febrero, el imponente desfile se montará en el corsódromo de 700 metros -ubicado sobre la avenida principal- donde los artesanos linqueños son los grandes protagonistas que sorprenden al público con carrozas gigantes y muñecos de cartapesta, una técnica que combina trozos de papel unidos por engrudo.
La fiesta presenta, a la vez, comparsas, batucadas, carros musicales, atracciones mecánicas, compañías de teatro y cuerpos de baile, informaron los organizadores.
Con una tradición que supera 130 años de historia, el Carnaval de Lincoln se identifica por sus impactantes creaciones de cartapesta que responden a la creatividad popular y un «saber hacer» que viaja de generación en generación.
En la mayoría de los motivos siempre hay un condimento de humor y picardía, verdadera expresión que los artistas linqueños utilizan para disfrutar el carnaval.
Con más de tres metros de altura y diez de largo, las carrozas son uno de los mayores atractivos que concentra las miradas de propios y extraños.
De igual manera, aunque en otra escala, las minicarrozas, máscaras sueltas, los tradicionales cabezudos gigantes y las majestuosas marionetas también despliegan color y alegría a cada paso, causando furor en un público que abarca todas las edades.
Todos los años el carnaval linqueño premia el trabajo, el ingenio y la creatividad de cada motivo que noche a noche componen el desfile, y para esta edición se repartirán 70.000.000 de esos en premios entre las distintas categorías.
El Carnaval convocará en su escenario a numerosos artistas como La K’onga, La Beriso, Jorge Rojas, Rodrigo Tapari, FMK, Migrantes y Dale Q’ Va.
Desde 1994 Lincoln es la Capital Nacional del Carnaval Artesanal a través de la ley nacional Nº 27.404; una fiesta que cobró popularidad por el despliegue de carrozas y muñecos realizados con cartapesta.