El mediocampista Brian Alvarez fue suspendido ayer por seis meses, luego de los incidentes que lo tuvieron como protagonista en el cierre de la final que Estudiantil de Eduardo Castex le ganó por penales a All Boys de Santa Rosa, como visitante, por el Torneo Provincial de fútbol 2023.
Al finalizar el partido, que coronó al bohemio en la definición desde los doce pasos (4-3), varios jugadores, integrantes del cuerpo técnico y auxiliares se fueron encima del árbitro Martín Gubar, quien cobró un polémico penal en el descuento y que le permitió a los castenses lograr la igualdad (2-2) que llevó la serie a los penales, publicó el diario La Arena.
Custodiada por la Policía, la terna arbitral se retiró a los vestuarios en medio de insultos de los protagonistas y de la platea alboyense, desde donde también cayeron algunos elementos y un sinnúmero de escupitajos. En ese momento, Gubar individualizó a algunos de los futbolistas que lo rodeaban e identificó a Álvarez como el que le arrojó una botella que lo golpeó luego de pegar en un escudo policial.
En ese contexto, y tras analizar el informe arbitral y el correspondiente descargo del jugador, el Tribunal de Disciplina señaló que «el imputado se ha limitado a excusarse de los hechos endilgados en el informe, sin aportar ningún elemento probatorio que desvirtúe el mismo», y que «reconoce haber arrojado la botella con agua y que la misma le impactó al árbitro principal del partido, argumentando que dicho elemento fue arrojado en dirección hacia el personal policial».
Además, explicó que «la conducta descripta» dispone una «suspensión de un (1) año a cinco (5) años al jugador que agreda al árbitro aplicándole golpe por cualquier medio», pero que para definir la sanción se tuvo en cuenta que «el hecho no ha causado lesión grave al árbitro» y a la vez «la falta de antecedentes del imputado».
Así, decidió sancionar a Álvarez con seis meses de suspensión, «computándose a tal efecto la sanción provisoria desde fecha 3 de mayo de 2023», por lo que el futbolista cumplirá su pena el 3 de noviembre de este año.
Álvarez, al igual que el resto de los suspendidos en el Provincial, deberá cumplir su pena en el Torneo Oficial de la Liga. Junto al mediocampista de All Boys, tras la final también habían sido expulsados sus compañeros Jerónimo Gutiérrez y Josu Monasterio, quienes recibieron dos fechas de suspensión, al igual que Marcelo Costantino (ayudante de campo) y Lucas Ranocchia (preparador físico), en todos los casos por insultos contra el árbitro Gubar.
MULTA Y DESCARGO
Por otra parte, el Tribunal de Disciplina le aplicó una multa al Club All Boys por los incidentes, al tiempo que le pidió un descargo al dirigente del fútbol Juan Pablo Saffeni, a quien el árbitro informó por haberlo insultado.
En el sumario al club, el Tribunal explicó que «All Boys se ha limitado a excusarse parcialmente de los hechos endilgados en el informe arbitral, sin aportar ningún elemento probatorio que desvirtúe el mismo», al tiempo que aseguró que la institución «no ha desconocido el hecho de que su parcialidad arrojó piedras contra los árbitros del partido».
Por ello, resolvió aplicarle al club una «multa de una fecha por el valor de cincuenta entradas (precio de venta al público)», lo que equivale a 50 tickets de 700 pesos (el precio de la general), para dar un total de 35 mil pesos.
En cuanto al sumario iniciado a Saffeni, se le solicitó al ex futbolista un descargo sobre los hechos denunciados por el árbitro Gubar, quien en su informe sobre los incidentes al finalizar el partido, declaró: «…en el trayecto que voy caminando hacia una salida alternativa, observo a directivos del club local, a quien identifico al señor Saffeni, quien se dirige hacia mi persona diciendo: ‘Sos un ladrón, vas a ver si podés salir del estadio, hijo de puta, nos robaste hijo de mil puta…'».
