Un grupo de 75 estudiantes de tercer y cuarto año del Colegio Secundario Polivalente de Arte, de Santa Rosa, participó de una charla sobre ciberdelitos que brindó la defensora oficial, María Silvina Blanco Gómez, en la biblioteca de la institución, en el marco del programa “Educación + Justicia” que promueve el Superior Tribunal de Justicia.
Durante ella, y a partir de una serie de preguntas que presentaron los alumnos y alumnas, la funcionaria explicó cuáles son los delitos que el Código Penal incluye en esa categoría y cuáles son las conductas similares que no están abarcadas en ese texto.
¿Qué preguntaron los jóvenes? Lo siguiente: ¿qué es Anonymous y qué hace?, ¿qué tipo de delitos informáticos existen?, ¿cuáles son las penas para los delitos informáticos?, ¿cuándo se considera que se produjo un ciberdelito?, ¿qué leyes nos resguardan cuando ocurren esos delitos?, ¿se puede conocer la identidad real de una persona que está detrás de un ciberdelito con un perfil falso?, ¿cuándo y cómo nos damos cuenta que se está cometiendo un ciberacoso?, ¿qué consejos daría acerca de enviar la ubicación actual por Whatsapp?, ¿cómo se puede recuperar una cuenta luego de ser hacheada?, ¿cómo denunciar un ciberdelito?, ¿cómo hacer para que el uso de Instagram sea más seguro?, ¿qué hay que tener en cuenta al usar las redes sociales?, ¿existe una forma recomendable?
EXPLICACIONES
A partir de esas inquietudes, Blanco Gómez explicó como se producen las sustituciones de identidad y qué precauciones hay que tomar ante ello; especialmente no responder frente al mensaje de un desconocido, tratar de constatar previamente su identidad o recurrir a un adulto mayor. Justamente la usurpación de identidad es una figura que el C.P. prevé como delito.
Más adelante, la defensora señaló que ante esas situaciones lo recomendable “es no borrar nada e ir con ese material al Ministerio Público o a la policía a formular una denuncia. Tampoco es conveniente que un mayor se ponga a responderle a quien envió el mensaje, bajo una identidad falsa, porque podría estar alertándolo”.
“Siempre decimos lo mismo, las redes sociales no son herramientas malas; pero hay que usarlas con responsabilidad porque a través de cada mensaje, foto o video que ustedes publican están armando su propia huella digital y esa información puede ser utilizada por muchas personas –agregó Blanco Gómez–. ¿Por qué? Porque con solo una imagen pueden mostrar dónde viven, a qué colegio van, quiénes son sus amigos, qué vestimenta usan y qué lugares frecuentan, entre muchas otros datos”.
También la disertante habló sobre el delito de grooming, es decir el contacto de un mayor con una niña, niño o adolescente, a través de medios electrónicos y con fines sexuales. “No hace falta que exista un contacto físico entre ambos, sino que el delito se comete –y está penado con hasta cuatro años de prisión– por el solo hecho de que la persona mayor, que puede ser hombre o mujer, contacta al menor para pedirle algo que tenga connotación sexual, como puede ser un video o una foto”.
PROGRAMA EDUCATIVO
“Educación + Justicia” es una iniciativa que el STJ promovió en 2015 y a través de este programa se busca un acercamiento real, y especialmente de los jóvenes que están cerca de cumplir la mayoría de edad, a la Justicia pampeana.
Su oferta pedagógica incluye charlas de funcionarios y magistrados en las escuelas –especialmente del interior de la provincia–, asistencia de alumnos/as a debates orales, visitas guiadas a edificios judiciales y la organización de simulacros de juicio.