Luego de la difusión de sus imágenes junto al expresidente Alberto Fernández, la conductora Tamara Pettinato posteó un extenso descargo en sus redes sociales en el que asegura que “nunca le sacó beneficio» a dicho vínculo y que «la están usando».
En una serie de posteos, la joven habló de “una campaña de hostigamiento” en su contra y denunció “amenazas”.
El comunicado
«Luego de un breve silencio tengo la necesidad de aclarar algunas cosas. En los últimos días, fui víctima de una campaña de hostigamiento producto de la publicación de un video de carácter privado en el que aparezco filmada por el expresidente Alberto Fernández. Las intenciones por las cuales se hace público y se difunde ese material pueden ser muchas. No me voy a detener en eso ahora.
Sí, tengo que decir que desde que se publicó estoy siendo blanco de innumerables acosos y amenazas referidas a mi vida privada, plagadas de mentiras e información falsa. Algunas se pueden ver en medios de comunicación y redes sociales, otras llegan vía mensajería privada con mensajes intimidatorios, haciendo mención también a posibles nuevas difusiones. En primer lugar, quiero aclarar que las imágenes corresponden a un almuerzo que tuve con el expresidente luego de realizar una entrevista en Casa Rosada en el marco de un trabajo documental para la televisión china sobre las relaciones de ese país con la Argentina en enero del año 2022. No había restricciones sanitarias en ese momento.
Resulta obvio que conozco al expresidente y tenía un vínculo de confianza con él. Sin embargo, una cosa no quita la otra. Lo que se dice de las circunstancias en las que se grabaron esas imágenes es falso. Me están usando. No soy ingenua y trabajo en los medios hace más de 20 años, ahora, ¿no es una obviedad que están desviando el foco de atención? ¿Resulta que una denuncia por violencia de género se tapa con más violencia contra una mujer? En segundo término, respecto del trabajo que realicé para la Secretaría de Comercio de la Nación, aclaro lo siguiente: Para esa campaña fui contratada por una productora privada y bajo ningún aspecto cobré el importe que están haciendo circular en medios de comunicación, con absoluta liviandad y sin ningún documento que lo pruebe.
No me acomodó ni recomendó nadie. Es el único trabajo en relación con el Estado que tuve. Duró UN solo día en noviembre de 2022. Nunca le saqué beneficio a mi vínculo con el expresidente. Qué ironía. ¿Se defiende a una víctima de violencia de género mediante su revictimización? ¿Se la protege atacando, cosificando y denigrando a otra mujer? La hipocresía y la mentira al servicio del poder machista.
Escribo esto para pedirles públicamente que se deje de utilizar mi nombre y de hacerse valoraciones morales en el marco de una situación que me excede, que se respete mi persona sin ser víctima de hostigamiento y persecución. Me ven o me escuchan todos los días en mis lugares de trabajo habituales. Gracias a todos los que mandan mensajes de apoyo y aportan algo de sensatez”.