El gerente de la sucursal del BNA en Eduardo Castex, Néstor Correa, aseguró que este jueves “entre las 10 y las 11 horas” un jerárquico le comunicó telefónicamente “el cierre de esta sucursal y otras en La Pampa”. “Son decisiones muy apresuradas que no creo que se hayan evaluado porque son muy complicadas”, admitió el funcionario bancario. Y estimó que el cierre del edificio bancario se concretaría en un lapso de entre “60 y 90 días” porque “hay muchas cosas por definir y redistribuir los empleados y los clientes”.
Los trabajadores y vecinos castenses realizaron, a las 9.30 horas, un abrazo simbólico al centenario edificio ubicado en el cruce de calles Sarmiento y Estanislao Zeballos. Donde se percibió la angustia de los doce trabajadores afectados por la decisión del gobierno de Javier Milei de cerrar nueve sucursales de la banca estatal nacional en La Pampa.
“Se tomaron decisiones sin tomar en cuenta la gente que padecerá la gente, y eso es un poco el enojo que tengo con mis autoridades, y casi que nos prohibieron hacer declaraciones, pero eso poco me importa en este momento de incertidumbre y tanta preocupación”, expresó el gerente de la sucursal Eduardo Castex del BNA.
“Me parece que es una cosa muy loca cerrar nueve sucursales que son parte de la idiosincrasia de los pueblos pampeanos, porque no se puede borrar la historia de este banco en los pueblos pampeanos”, criticó.
“SITUACIÓN COMPLICADA”
“Es una situación muy complicada para todos. Si se concreta, porque tenemos una leve esperanza que estas cuestiones se deberían resolver de otra manera”, planteó el directivo.
“Nos comunicó oficialmente un jerárquico que se procede al cierre de la sucursal Eduardo Castex, que no sería de un día para el otro y nos dijeron que sería en un lapso de 60 o 90 días porque hay muchas cosas que definir y redistribuir los empleados y los clientes en las cinco sucursales que quedaron en La Pampa, porque ahora dependemos de San Luis”, explicó.
Correa transmitió que en este momento “no pienso en la situación personal porque como funcionarios estamos acostumbrados al desarraigo, lo que más me preocupa y entristece es la situación de los empleados, más allá que se conservarían los puestos de trabajo, pero mi pensamiento no es tan positivo”.
“Se cierra en un proceso de 60 o 90 días para determinar (si los clientes) van a pertenecer a otra sucursal será una incomodidad, pero no habrá problemas con los depósitos u operaciones bancarias y los sistemas seguirán funcionando”, planteó.
Correa narró que este fin de semana el BNA iba a tener un stand en Expo Castex, pero ya confirmaron que no asistirán porque los trabajadores afectados anímicamente, y en estos momentos “no podemos ir a representar a gente que está cerrando la sucursal”.
