El gobernador Sergio Ziliotto aseguró este viernes que la decisión de anunciar el cierre de nueve sucursales del Banco Nación en La Pampa «es una extorsión más del gobierno nacional». Aclaró que «si hay un compromiso del gobierno nacional de cubrir lo que nos deben, retrotraemos la medida. Mientras tanto, tenemos la obligación indelegable del Estado, entre todas las obligaciones básicas, de proteger a los que menos tienen».
Ziliotto habló este viernes a la mañana en Radio 10 y recordó que “en diciembre el gobierno nacional planteó la privatización del Banco Nación, que, después del rechazo del Congreso de la Nación, se transformó en un vaciamiento. En La Pampa, el cierre de las sucursales es una medida que se venía hablando hace mucho tiempo».
“Las medidas que tomó la Legislatura de la provincia, por solo cuatro meses, de un incremento de la alícuota de los Ingresos Brutos, es exclusivamente al sistema financiero y los Casinos y tienen que ver con paliar la terrible deuda que tiene el Gobierno Nacional con La Pampa y que, a su vez, estos nuevos recursos, están destinados, con afectación específica, para garantizar los alimentos a sectores vulnerables», dijo Ziliotto.
«Esto ha sido tomado como una excusa más, para tratar de disfrazar la realidad y lo que pasa. Nosotros tenemos en claro que tenemos todo el andamiaje para defender a los trabajadores. Acá hay movimiento muy fuerte, de todos los partidos políticos, en defensa del Banco Nación. Ayer, salieron los intendentes de la oposición, porque la mayoría de los lugares en donde se cierran las sucursales del Banco Nación, es donde Milei ganó con mayor cantidad de votos», afirmó.
Agregó que «tratar de disfrazar una decisión que va mucho más allá, que tiene que ver con un criterio de vaciamiento, de menosprecio al interior, y se quiere utilizar una medida coyuntural, para cerrar sucursales que tienen más de 100 años de vida y que, tiene una presencia territorial en La Pampa».
Repasó que «el 70% del sistema financiero pampeano, lo maneja el Banco de La Pampa. Tenemos presencia en 80 localidades y el Banco Nación, en 14. Por supuesto que no vamos a soslayar esto, porque un puesto de trabajo duele. Tampoco se habla de despidos, sino de reacomodamientos. Esta es una presión, una extorsión más del gobierno nacional, con la provincia de La Pampa».
Ziliotto dijo que «nuestra ley, en La Pampa, es transitoria, por cuatro meses. Ayer hablé con Sergio Palazzo, explicando el motivo y siempre lo planteé en el debate aquí. Si el gobierno nacional nos devuelve el 10% de lo que nos debe, y que se ha apropiado ilegalmente de recursos de la provincia, inmediatamente, mandamos un proyecto de ley a la Cámara, derogando este aporte extraordinario. Además, al aporte se sumó a funcionarios de los tres poderes del estado que, durante cuatro meses, vamos a aportar a este fondo solidario y sostener la ayuda alimentaria».
Defendió la medida en que «en el interior pampeano la actividad económica se desplomó. Y el estado, tiene la obligación de proteger a los sectores vulnerables, por eso, decidimos que quienes han tenido una enorme ganancia, en este caso, el sistema financiero, por cuatro meses y por única vez, haga un pequeño esfuerzo, el esfuerzo es el de llevar la alícuota del 9 al 15%».
«Hay que recordar que la afectación específica de ese fondo es para que 10.000 familias de La Pampa, vía tarjeta de compra, se puedan comprar alimentos», insistió.
«Lo ratifico: si hay un compromiso del gobierno nacional de cubrir lo que nos deben, retrotraemos la medida. Mientras tanto, tenemos la obligación indelegable del estado, entre todas las obligaciones básicas, de proteger a los que menos tienen», afirmó.
El gobernador pidió a las autoridades nacionales «que pongan la cara y que digan que quieren privatizar el Banco Nación. Y, en ese esquema, sobran 9 sucursales en La Pampa y que tienen baja densidad poblacional y que es parte de su plan de vaciamiento, luego del frustrado intento de privatización en la primera versión de la Ley Bases».