Los fiscales Andrés Torino y Walter Martos, pertenecientes a la Fiscalía Temática de Delitos contra las Personas y de delitos que impliquen violencia familiar y de Género respectivamente, continúan la investigación sobre la muerte de Antonella Villalba, la joven que se suicidó –el domingo- en la vivienda que ocupaba en la ciudad de Toay.
Ambos intervienen desde el momento en que se conoció la muerte de la joven: Torino, por ser un delito contra las Personas, y Martos, por la situación de violencia de género en la que se encontraría la mujer, según datos aportados por vecinos. Además, la intervención conjunta lo dispone el protocolo de investigación de femicidios.
Los fiscales confirmaron que «materialmente no hay intervención de un tercero» en la muerte de Villalba, de acuerdo al material probatorio que poseen. Además, tampoco se constató que hubiera ayuda de otras personas en el trágico suceso.
Sin embargo, ante el contexto de vulnerabilidad social en el que se encontraba la mujer y una relación de pareja con situaciones de violencia de género, los fiscales continúan la investigación sobre una posible instigación al suicidio. «Es una figura muy compleja, quizás desactualizada con el enfoque de violencia de género, pero debemos investigar en ese sentido», expresaron los funcionarios judiciales.
Finalmente, indicaron que están pendientes diligencias para analizar esta situación, las que se llevarán adelante próximamente.
