Los niños que concurran -desde mañana- a la colonia de vacaciones del programa Pro Vida tendrán que abonar $ 3.500 semanales para “cubrir” el costo del transporte desde las paradas establecidas en la zona urbana hasta el Complejo Polideportivo municipal de Eduardo Castex. La inédita medida, que no se aplicó ni siquiera en la profunda crisis económica y social de 2001, fue confirmada por el director de Deportes y Juventud, Sacha Elosegui, quien argumentó que el presupuesto asignado por el gobierno provincial “no cubre la mitad” de los costos que genera la colonia de vacaciones durante poco más de un mes.
“No teníamos opciones para llevar adelante el desarrollo de la colonia de vacaciones, y tomamos está decisión para mantener la esencia de las actividades y pretendemos que ningún chico se quede sin concurrir, porque si no pueden pagar el transporte serán subsidiados a través de Acción Social”, expresó
el funcionario municipal.
La resolución de las autoridades municipales tuvo muchos rechazos en las redes sociales, donde algunos vecinos objetan a la gestión municipal que realiza algunos “gastos innecesarios”, y aplica la motosierra con los más pequeños que tienen una alternativa veraniega en en esta colonia de vacaciones pública, ante los desmesurados precios de las mismas actividades en el sector privado.
Curtuchet últimamente profundizó un discurso con cierto alineamiento libertario, y comenzó a aplicar una fuerte impronta recaudatoria, donde los tarifazos de tasas municipales se sobreponen sobre la sensibilidad y algunos derechos de los sectores más afectados por la desregulación de la economía que dispuso la administración nacional. La jefa comunal plantea insistentemente que los recursos del Estado “son finitos”, y apela a que “el vecino ponga su aporte” para abonar obras otorgadas por el gobierno provincial para financiar las arcas municipales. Ahora, también le cobrará el transporte a los niños que concurran a la colonia de vacaciones estatal.
