El gobierno demora la publicación del decreto que oficializa la baja de retenciones que anunció Luis Caputo por errores técnicos que tornan imposible su aplicación. Como anticipó LPO, las cerealeras exigieron al ministro de Economía una reunión de urgencia para conocer el detalle de la implementación y, según fuentes del sector, encontraron defectos muy serios que complican la entrada en vigencia de la medida.
Después de tres días desde el momento en que Caputo se viera forzado a hacer el anuncio, acompañado por el vocero Manuel Adorni, el decreto sigue sin publicarse en Boletín Oficial, ofreciendo así un indicio más que se trató de una decisión sacada a la apurada, entre otras razones por la peligrosa caída de reservas.
La subdirección de Fiscalización de ARCA, a cargo de Sergio Rufail, no tiene disponible aún los sistemas para los registros con las nuevas alícuotas de retención.
Este sábado las discusiones entre Caputo y las cerealeras volvieron a trabarse -como había pasado el viernes- cuando se trató el tema de la soja paraguaya. Las cerealeras quieren que la baja de retenciones incluya a la soja importada de Paraguay y el gobierno se resiste. Desde CIARA le explicaron al ministro que no se puede distinguir entre un producto y otro.
La falta de precisiones sobre la medida no es casual. LPO informó que el apuro de Caputo por lanzar una medida que había rechazado en un largo posteo en X, apenas 48 horas antes dejaba en evidencia que se trató de una decisión poco trabajada. El ministro llegó al salón desde donde realizó el anuncio vestido de jeans y zapatillas, luciendo un saco que no pegaba con el resto de su indumentaria, como si hubiese ido de apuro.
Ahora empieza a confimarse que el gobierno apuró la medida sin un trabajo previo y sin tener afinados los mecanismos para su implementación. Es que desde que está el decreto, hay todo un trabajo a actualizar en los sistemas de ARCA, que no es tan sencillo ni rápido.
Entre la dirigencia del sector agropecuario, se rumorea que fue el presidente de la Sociedad Rural, Nicolás Pino, quien convenció a Javier Milei de establecer una baja de las retenciones «temporal», una suerte de remake de la cuarta versión del dólar soja que diseñó Sergio Massa durante su paso por el Palacio de Hacienda.