Gendarmería trasladó a un comandante que descubrió una operación de contrabando en Formosa en un municipio que gobierna un intendente cercano a Javier Milei. Patricia Bullrich, que controla la fuerza de Seguridad, mandó al comandante a vivir a Neuquén. Los contrabandistas estarían vinculados al intendente de Las Lomitas, la capital nacional del horno. El gendarme Tanco ahora vive en la nieve.
Pedro Federico Tanco debió dejar el cuartel de Gendarmería de Las Lomitas y trasladarse a Neuquén. Ese cuartel había alojado a Carlos Menem durante algunos días en los años 80 cuando cumplía con el arresto sui generis impuesto por la Dictadura.
Tanco, que comparte apellido con uno de los generales que se alzó contra la Revolución Libertadora, desbarató semanas atrás una operación de contrabando que incluía electrodomésticos, bebidas alcohólicas y perfume que ingresaron al país desde Bolivia.
Según aseguran en Formosa, el exitoso operativo le costó el puesto: los damnificados son personas allegadas al poder político de Las Lomitas.
Atilio Basualdo, intendente de Las Lomitas, fue uno de los dirigentes más mimados por Insfrán, pero se acercó a los libertarios de la mano de Francisco Paoltroni. Tras la salida del senador, Basualdo fortaleció la relación con Bullrich.
Patricia le envió una motoniveladora y otros recursos que afianzaron el vínculo. La ministra también se ocupó de trasladar a Tanco, que pasó de vivir en la «capital nacional del horno» a una ciudad que tiene nevadas durante el invierno.
