El empresario Elon Musk está en Brasil para reunirse este viernes con el presidente de ese país, Jair Bolsonaro, por un proyecto de internet en la selva amazónica, según anunció en su cuenta de Twitter el ministro de Comunicaciones, Fábio Faria.
«¡Nadie se esperaba esto! Como vamos a conectar el Amazonas, trajimos a uno de los empresarios más grandes del mundo para que nos ayude en esta misión. ¡Aceptamos el reto y vamos hasta el final! Gracias, @elonmusk, por la visita», detalló Faria.
Musk, fundador de Tesla, de Space X y posible dueño de Twitter, expresó: «Muy emocionado de estar en Brasil para el lanzamiento de Starlink para 19,000 escuelas desconectadas en áreas rurales y monitoreo ambiental del Amazonas». Starlink es una empresa -también de Musk- que ofrece conectividad satelital.
El multimillonario sudafricano, que la semana pasada puso en duda su contrato por la compra de Twitter debido a un porcentaje mayor de lo que él esperaba de la presencia de cuentas falsas en esa red social, se reunirá con Bolsonaro, quien está siendo investigado por la difusión de noticias falsas.
El presidente de Brasil, quien buscará ser reelecto en los comicios de octubre próximo, había dicho días anteriores que tenía previsto un encuentro de carácter «reservado» en Sao Paulo «con una persona muy importante que es reconocida en todo el mundo».
«Viene a ofrecer su ayuda para nuestra Amazonía», dijo el mandatario en su transmisión semanal por redes sociales, sin dar nombres.
El jefe de Gabinete de Brasil, Ciro Nogueira, publicó en la mañana del viernes en su cuenta de Twitter: «Está en Brasil, por invitación del ministro @fabiofaria, el empresario@elonmusk, de Tesla. La búsqueda de proyectos tecnológicos a favor de los brasileños es lo que mueve al ministro, que una vez más al frente promueve un fructífero encuentro con el presidente @jairbolsonaro, en el que estaré presente».
Entre avisos oficiales, Musk además continúa con sus cataratas de tuits en la que a través de ironías y sarcasmo parece apuntar al escarnio público al criticar la reputación de los directivos de la red social que va a encabezar, con matices políticos.
Asimismo, le comparte a sus más 94 millones de seguidores algunos memes sobre temas delicados, como sobre el «mansplaining», sin ningún contexto explicativo y más bien buscando la polémica.
