Las provincias cerraron la primera mitad del año con un incremento nominal promedio del 64% en su recaudación y una mejora del 4,2% en términos reales, una performance que alimenta el escenario de un resultado fiscal que hace prever que 2022 podría ser el quinto año consecutivo con superávit primario consolidado.
Esa instantánea delinea un presente menos apremiante en materia de cuentas para los gobernadores que para el deficitario Estado nacional, en medio de las señales de alerta de los mandatarios respecto del impacto en las arcas locales de los recortes de gasto público que delinea el ministro de Economía, Sergio Massa, en el marco del diseño del proyecto de presupuesto nacional 2023.
Según un informe de la consultora Politikon Chaco, la recaudación de recursos de origen provincial para el consolidado de veinte jurisdicciones totalizó al primer semestre un billón 689.022,8 millones, con una suba real en mayo (el mes de mayor crecimiento porcentual) de 8,8% “tras un primer cuatrimestre algo más débil”.
El dato fortalece la posibilidad de completar un lustro consecutivo de superávit primario consolidado, “un hecho excepcional” según el director del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf), Nadín Argañaraz. Ello, tras un 2021 que además mostró un resultado poco común en la historia reciente, de la mano de provincias también con resultado financiero superavitario.
En lo que respecta a las recaudaciones locales durante el primer semestre, 4 jurisdicciones embolsaron recursos que triplicaron a los de las 16 restantes. La provincia de Buenos Aires obtuvo recursos tributarios propios por $592.719, 2 millones (equivalentes al 35,09% del total), seguida por CABA con $ 396.973,3 millones (25,50%); Córdoba, con $149.976,7 millones (8,88%) y Santa Fe, con $129.464,9 millones (7,66%). En quinto lugar estuvo Mendoza, con el 3,5% del total, mientras que el resto no alcanzó el 3% de participación.
“San Luis, San Juan, Jujuy, Formosa y La Rioja son las únicas que no superan el punto porcentual de participación sobre el consolidado nacional”, destacó Politikon Chaco.
Esa disparidad, a su vez, impactó en la desigual evolución porcentual de la recaudación, en la que se evidenció un crecimiento más significativo en las jurisdicciones de menor peso relativo.
En moneda constante, 4 provincias cerraron el primer semestre con subas reales de doble dígito: Formosa (20,1%), Chaco (11,9%), Jujuy (11,2%) y Santa Cruz (10,4%).
Escenario bonaerense
Con ese telón de fondo, el director ejecutivo de la Agencia de Recaudación de la Provincia de Buenos Aires (ARBA), Cristian Girard, destacó el crecimiento real de los recursos tributarios locales, en el marco de la apuesta del Gobierno de Axel Kicillof a “trabajar sobre la estructura de progresividad” y una mejora en las tareas de fiscalización.
“Cerrado julio, la recaudación en la Provincia mostró un crecimiento interanual en términos reales, en una tendencia que estamos observando desde el segundo trimestre de 2021”, dijo, tras el duro impacto en la actividad en el primer tramo de la pandemia con su correlato negativo en la percepción de tributos.
Girard subrayó además que en 2020 encararon “un proceso de mejoras de las leyes impositivas para trabajar sobre la estructura de progresividad de los impuestos patrimoniales, con el objetivo de recomponer su peso en la estructura de ingresos tributarios”.
“Eliminamos las distorsiones que surgían de las políticas de topes que había aplicado la gestión de (la exgobernadora María Eugenia) Vidal tras el revalúo, beneficiando con esa estructura de topes a quienes tienen patrimonio de mayor valuación y perjudicando relativamente a los de menor valuación”, señaló el funcionario bonaerense. Y resaltó además que “el control, la detección y la puesta en norma de la evasión permitió también ver una mejora en la recaudación de los impuestos patrimoniales”.
