El huracán Dorian se convirtió este lunes en el segundo ciclón más poderoso de la historia registrado en la cuenta del Atlántico. Su devastador paso por Bahamas dejó al menos cinco muertos y un ambiente desolador en las calles de la isla. Si bien por fuera su fuerza es impactante, por dentro la calma contrasta.
Garrett Black, un cazador de tormentas de EEUU, logró captar desde un avión el ojo del devastador huracán. El meteorólogo, miembro de lasFuerza Aérea de EEUU, difundió las imágenes luego de que ingresase en su interior a bordo de un Súper Hércules.
Allí se observa una calma absoluta que contrasta con el escenario devastador que dejó a su paso la tormenta luego de tocar tierra en Bahamas. Black junto con su equipo realizan tareas de recopilación de datos para el Centro Nacional de Huracanes de EEUU.
La información que obtienen del interior de las tormentas luego es usada para predecir con mayor precisión y certeza el movimiento de las mismas, de manera tal que pueda anticiparse su impacto y alertar a la población para su resguardo.
Al mismo tiempo que generaba destrozos en la isla, en Florida se preparaban para un posible impacto de la tormenta que puede darse en las próximas horas. Allí se ordenó la evacuación de al menos un millón de personas.