Juan Román Riquelme, vicepresidente de Boca Juniors, dijo este lunes que «el contrario no pateó al arco» después de la victoria del equipo «xeneize» ante River por 1 a 0 en la Bombonera, por la Liga Profesional.
«Estos muchachos tienen el derecho de festejar y los hinchas tienen que sentirse felices de los jugadores que tienen. El clásico se gana metiendo más goles que el rival, el contrario no pateó al arco, eso quiere decir que le competiste bien porque hablamos de un equipo que tienen jugadores muy buenos», sostuvo Riquelme.
«Tienen a (Matías) Suárez, tienen a (Juan Fernando) Quintero, a (Nicolás) De La Cruz, a (Milton) Casco que ataca bien, y para que no te pateen al arco quiere decir que hiciste un partido muy serio, muy bueno. Y al final tuvimos la suerte de terminar festejando”, destacó en diálogo con TyC Sports este mediodía el responsable del Consejo de Fútbol boquense.
En cuanto a la actitud de sus jugadores en el triunfo ante su clásico rival, el ídolo boquense expresó sentirse «orgulloso de ser bostero. Estoy muy agradecido con los jugadores que tenemos. Defienden la camiseta de nuestro club y compiten al máximo».
«En dos años y medio, Boca es el equipo que más títulos ganó. Solamente le podemos dar las gracias a los jugadores, nos dan muchísimas alegrías y los reconocen poco”, agregó Román.
Respecto del entrenador Hugo Ibarra, a quien a fin de año se le vence su contrato y que llegó como técnico de la reserva ante la salida de Sebastián Battaglia, el vicepresidente de Boca expresó un fuerte respaldo.
«Ibarra es el técnico de Boca porque estamos convencidos de que tiene las condiciones para ser nuestro entrenador. Eso es lo primero, y él estaba convencido de cómo iba a salir a jugar este partido. En mi manera de ver el fútbol, en los primeros 20 o 25 minutos lo ha hecho muy bien, solo le faltó la última jugada. El clásico se compite al máximo, se juega así. No nos confundamos y pensemos que son bonitos y se juega lindo”, analizó.
El «10» también se refirió a los hinchas de Boca y al «patio de su casa», como llama al estadio Alberto J. Armando: “Está pasando lo que sucedió siempre. En cancha de ellos nosotros sabemos que vamos a sufrir porque son buenos jugadores y en cancha nuestra van a sufrir ellos. Les hacemos sentir la Bombonera. Fue una verdadera fiesta», señaló.
«Estamos contentos por haber vuelto a jugar en nuestro estadio con gente después de tres años. Fue una fiesta. La Bombonera está cada día más linda y la gente disfruta mucho. En los partidos anteriores que hemos jugado en nuestra casa sin gente merecíamos ganarlos 2-0 o 3-0. Armani esos días atajó una maravilla, sacó pelotas imposibles… Y otro chico que atajó en River (Alan Díaz) y fue figura».
Cuando le preguntaron por qué ganó Boca, Riquelme respondió: «Yo tuve la suerte de estar en muchos clásicos como jugador, ahora me toca estar afuera. Sabemos que este tipo de rival tiene jugadores muy buenos, creo que es muy difícil ver un clásico -sea del estadio que sea- y que salga 4-4 o 5-5. Los clásicos se ganan por un gol y el que lo mete primero casi siempre lo gana».
«Boca en el primer tiempo lo ha hecho bien, la mejor jugada del partido fue la que termina Ramírez haciendo un sombrero con un taco. Fueron seis toques muy buenos, una maravilla. Si uno se pone a mirar la jugada previa al gol (antes del córner que conectó Darío Benedetto de cabeza), es una muy buena jugada que termina atajando Armani, que en nuestra cancha algo imposible siempre hace”, agregó.
Riquelme destacó la actuación de Benedetto, autor del gol de la victoria: «Darío hizo lo normal, lo que sabe hacer. Era lógico que en algún momento la pelota iba a entrar. En algún momento el gol iba a llegar. A él le dio vuelta el día de Corinthians y ahora le tocó meter un gol en el Superclásico y darle una alegría a nuestros hinchas. Estamos muy contentos de que estén en nuestro club y él se merecía meter este gol”, señaló.
El «10» no se olvidó de Juan Ramírez, uno de sus jugadores preferidos, quien ejecutó el tiro de esquina que luego conecto de cabeza el «Pipa».
“Lo del centro de Ramírez en el gol de Benedetto fue una maravilla. Fue un centro perfecto. Lo veo de lunes a viernes y por suerte pudo salir en el partido”, añadió.
Por último volvió a mostrar su felicidad por ganar el superclásico: «Estoy tranquilo y contento. Para nosotros lo importante siempre es ganar el clásico. Cuando vos lo ganás, sabés que tus hinchas están contentos, que se levantan contentos para ir a trabajar. Se siente la felicidad en la calle”, señaló.
El plantel de Boca entrenará esta tarde en el predio de Ezeiza, de cara al partido del próximo miércoles, de visitante ante Lanús, por la 19na. fecha de la Liga Profesional, con una ausencia obligada, la de Marcos Rojo, expulsado al final del partido contra River, y seguramente su lugar será ocupado por Carlos Zambrano.