21 de Noviembre de 1889 – Fallece Victoria Romero, a los 85 años de edad y se le dio sepultura en el oratorio de Atiles, cerca de Malazán, Provincia de La Rioja.
Figura legendaria, mujer de temperamento varonil e independiente. Esposa del caudillo riojano Ángel Vicente Peñaloza, a quien acompañó en sus campañas militares.
El 10 de Julio de 1822 contrae enlace con Angel Vicente “El Chacho” Peñaloza, y de este matrimonio nació Maria Mercedes en 1823 y Maria Facunda 1824, ambas fallecidas a muy corta edad.
Doña Vito (así llamaban a Victoria Romero) fue llamada por el destino a luchar incansablemente junto a su marido en aquellas horas aciagas para los riojanos. Fue estandarte y orgullo de aquellas legiones de titanes que, en la pelea, sacan fuerzas de la nada para arrojar al sanguinario invasor.
En la batalla del Manantial, librada por el Chacho contra fuerzas federales en 1842, Victoria realizó una hazaña que cimentó su fama, quien, viendo el peligro en que se hallaba su esposo, reúne unos cuantos soldados y poniéndose a su frente se precipita sobre los que atacaban a Peñaloza, con una decisión que habría honrado a cualquier guerrero.
El gesto le valió recibir un feroz sablazo sobre su cabeza, causándole una herida desde la frente hasta la boca. La tremenda cicatriz desfiguró el rostro de Victoria, que la disimulaba cubriéndose el rostro con un manto.
Viuda tras el vil asesinato de su esposo “Chacho” Peñaloza en 1863, fue humillada por el lamentable «prócer» Domingo Sarmiento que la despojo de sus bienes y la condenó a barrer la plaza del pueblo, luego de la decadencia y derrota riojana que fue su propia derrota.
