Desde fines del siglo XIX y hasta mediados de la década del 20, Quequén fue uno de los balnearios elegidos por la élite porteña. Ubicado al sudeste de la provincia de Buenos Aires, atraía a las familias más adineradas que construían sus casas de veraneo. El periodista, poeta y escritor Martín Coronado construyó allí su casa, luego conocida como Castillo Astelarra.
Esta joya arquitectónica está a la venta y se ofrece a una cifra de 400.000 dólares. Se suma al listado de selectos castillos que se venden en Argentina.
Cuando Martín Coronado la construyó, eligió disfrutarla para veranear y para escribir muchos de sus textos. “Cantó las cosas sencillas y los sentimientos humildes, y porque supo penetrar en el alma del pueblo, fue durante muchos años el más popular de nuestros poetas”, publicó Solo Tango al recordarlo, varias de sus poesías se convirtieron en tangos.
Construyó una casa de tres pisos, con un mirador que permite una vista de 360 grados para poder inspirarse y verlo todo. Ubicada en la calle 511 y 520, está a tres cuadras de la playa y casi enfrente del Monumento Gesta de Malvinas.
Coronado la disfrutó hasta 1919, año en el que murió. Su casa fue visitada por los más ilustres escritores de la época. Más tarde, en 1936, fue vendida al médico porteño José Astelarra, quién la puso en valor y la convirtió en el Castillo Astelarra. Uno de lugares que llama la atención al caminar por las calles de Quequén.
Hace más de cuatro años que está en venta, esta vez tiene un precio más que atractivo de 400.000 dólares por una propiedad de 649 metros cuadrados, 8 dormitorios y cuatro baños.
En la planta baja tiene una sala de estar, un dormitorio, baño y living con un comedor muy luminoso. En el segundo piso tiene seis habitaciones y en el tercer piso, se encuentra un pasillo hexagonal y un mirador con vista panorámica. Las fotos del aviso publicado en la web muestran que la propiedad se encuentra en muy buen estado.
Este castillo forma parte de las propiedades históricas de Quequén como el Hotel Balneario Victoria, que alberga a 300 huéspedes y que supo tener el salón comedor más grande de Sudamérica de 50 metros por 13. La Casona Stella Maris, conocida como “La Embrujada” y Villa Maris conocida como “La Trágica”, son algunas otras casas con historia.
Listado de históricos Castillos en venta
El listado de castillos en venta en Argentina es grande e incluye desde el Castillo de San Possidonio de Villa Allende construido por el reconocido arquitecto italiano César Augusto Ferrari, padre de León Ferrari, en la década del ‘30. Ubicado a 19 kilómetros de Córdoba, tiene un estilo neogótico y fue construido entre1932 y 1936. Tiene tres pisos y dos bajo tierra, hoy funciona una cafetería. Una inmobiliaria cordobesa lo ofrece a 500.000 dólares.
En la misma provincia de Córdoba, se vende el Castillo de Mandl de La Cumbre, es una de las 127 propiedades argentinas de lujo ofrecidas por la famosa casa Christie’s International Real State. Su último dueño fue Fritz Mandl, el heredero de la mayor fábrica de municiones de Austria. Quién ayudo a armar la Alemania de Hitler y luego llegó como refugiado a Argentina. Se casó con una actriz vienesa que filmó el primer desnudo total de la historia del cine. Construido en 1920 se ofrecía a 3.800.000 dólares, incluso más caro de lo que se vendía el piso 14 del edificio Kavanagh, más conocido por ser el piso de Corina Kavanagh. El Castillo Mandl tiene tres plantas y 16 habitaciones y está ubicado a 1.200 metros del nivel del mar. Fue diseñado por el arquitecto Emilio Maisonnave.
El Castillo Guerrero de Domselaar es otra de las joyas arquitectónicas que supo estar a la venta a casi 4 millones de dólares. Construido en 1880, en honor a Felicitas Guerrero, considerada la “más bella de la República”, según Guido Spano. En el castillo se filmó “El cuento de las comadrejas”, “Crónica de una fuga”, entre otras. Hace pocos años falleció Josefina Guerrero, la sobrina nieta que cuidaba el legado de Felicitas, quién murió asesinada por Enrique Ocampo que todos los días le escribía una carta de amor para conquistarla, pero ella se enamoró de Manuel Sáenz Valiente y Ocampo la mató. La propiedad tiene 28 ambientes, cada uno promedia los 55 metros y cuenta con techos de cinco metros de altura.
Las paredes de estos majestuosos castillos guardan anécdotas y secretos desde hace décadas. El Castillo Astelarra de Quequén es uno de los pocos castillos que están a la venta en la costa atlántica.
