“Ya veníamos conversando esta cuestión porque sabíamos que podrían llevarse por delante la Constitución. Los médicos pampeanos estamos decididos a judicializar la restitución del Impuesto a las Ganancias y durante esta semana seguiremos evaluando la forma de presentar el pedido de inconstitucionalidad, porque el proyecto fue aprobado por una sola Cámara del Congreso”, adelantó Jorge Jorja, director del hospital Segundo Taladriz de Toay.
El regreso de la cuarta categoría de Ganancias era uno de los puntos más controvertidos del paquete fiscal propuesto por el gobierno nacional y luego de su sanción distintos sectores denunciaron que la Cámara de Diputados había violado la Constitución Nacional, porque el proyecto había sido previamente rechazado en el Senado, publicó el diario La Arena.
En ese contexto, el gobernador de Chubut, Ignacio Torres, anunció ayer que reclamará su inconstitucionalidad, a pesar de que integra el bloque de gobernadores aliados a la gestión libertaria, uno de los principales interesados en esta restitución. Tras la aprobación del paquete fiscal, el mínimo no imponible ascendió a 1.800.000 pesos para los solteros y 2.200.000 para los casados con hijos, sobre el salario bruto. De esta manera unos 800.000 trabajadores volverán a pagar el tributo, entre ellos 13 mil pampeanos.
A LA JUSTICIA
Jorja explicó este domingo que “a partir del viernes los médicos de la salud pública provincial comenzamos a analizar un planteo judicial por inconstitucionalidad, aunque todavía debemos resolver si será mediante acción individual o una presentación colectiva”, entre otras cuestiones.
A los profesionales del sistema público se sumarían también los médicos del sector privado, agrupados en el Colegio Médico, entidad que a mediados de mayo publicó una solicitada advirtiendo que “los médicos asociados a nuestra institución y otros que realizan su trabajo en forma autónoma y categorizados como responsables inscriptos, ven afectados sustancialmente sus ingresos por el efecto de las retenciones que actualmente se les realiza” por este tributo.
Pero además, el recorte salarial ahora será mayor que antes porque “en esta oportunidad quitaron el 23% sobre el mínimo no imponible que existía para los trabajadores de la región patagónica”, precisamente una de las razones por las que el mandatario chubutense se vio obligado a plantear la inconstitucionalidad parlamentaria.
Los profesionales también expresaron una “gran indignación porque algunos diputados traicionaron al pueblo de La Pampa, sin tomar en cuenta que sus familias viven en esta provincia y que les solicitamos en forma unánime el rechazo a esta medida”.
Quienes votaron a favor fueron Martín Maquieyra y Martín Adohain. En cambio, la radical Marcela Coli y los justicialistas Ariel Rauschenberger y Varinia Marín, votaron en contra.
Previamente, en el Senado, los tres pampeanos, Daniel Bensusán, Daniel Kroneberger y Victoria Huala, habían rechazado la restitución del impuesto.
GUARDIAS
Junto con los salarios profesionales, el regreso de la cuarta categoría afectará seriamente los servicios de salud en la provincia.
“El problema mayor se presentará con las guardias, especialmente en horario nocturno. Cumplirlas representaba un dinero extra que contribuía a incrementar los ingresos, pero ahora los médicos reducirán al mínimo la cifra de guardias mensuales, para evitar un recorte mayor en sus salarios. Es una decisión lógica, porque no tiene ningún sentido trabajar más para cobrar menos”, lamentó Jorja.
El director del hospital toayense recordó que “esta situación ya la vivimos durante la gestión del gobernador Oscar Jorge, cuando los fines de semana venían médicos recién graduados de Córdoba y otras provincias a cumplir guardias en los hospitales porque los colegas pampeanos desistían de hacerlas”. El motivo era el mismo: esos adicionales se los llevaba el Impuesto a las Ganancias.
Pero esta vez el impacto sobre el sistema público será mucho mayor, en virtud del “tremendo aumento en la demanda de atención”, que multiplicó la cantidad de pacientes y prestaciones.
“En Toay teníamos 300 internaciones al año y hoy tenemos 2.800. Por mes atendíamos unos 16 mil pacientes, cifra que hoy ya supera los 30 mil”, concluyó.