La ministra de Educación, Marcela Feuerschvenger, presidió el acto por el 50° aniversario del CENS N° 3 “Alberto R. Campo”, emblemático establecimiento de la ciudad de General Pico.
La ministra de Educación manifestó -el viernes- que «festejar 50 años en la educación no es algo menor en la historia de General Pico”. “Desde el Ministerio de Educación trabajamos a diario entendiendo que la modalidad de jóvenes y adultos es la que restituye de manera permanente derechos, brindando aquellas oportunidades que en la edad de educación obligatoria no se pudieron realizar o cumplir. Es una modalidad que se visibiliza día a día, que crece y ha contribuido enormemente a disminuir el analfabetismo”, dijo.
La funcionaria provincial enfatizó que el CENS Nº 3 recibe “alumnos de todas las edades y precisamente la modalidad de adultos permite esto, que aquellas personas de mayor edad puedan terminar sus estudios”.
“Resurgiendo este derecho a la educación, viendo cómo no solo crece la modalidad educativa sino también ayudando y apoyando el crecimiento de las personas, contando para esto con extensiones áulicas en otras localidades y para lograr los objetivos propuestos, se necesita mucho del compromiso docente, que es lo que se ve en estas instituciones”, concluyó.
“EL ORGULLO DE FORMAR”
Por su parte la directora del CENS Nº 3, Paola Bazán, agradeció el acompañamiento porque “siempre hemos tenido un común denominador, y es el orgullo por haber formado y ser parte de esta institución”.
“Nuestro agradecimiento es hacia todos, docentes, porteros, personal administrativo, alumnos y ex alumnos. Es el resultado de lo que a lo largo de estos 50 años ha brindado el CENS, calidad educativa, escucha, inclusión y acompañamiento”, agregó.
“Por esto hemos creado nuestra propia identidad, para quienes han tomado la decisión de ir al encuentro de otras personas para satisfacer un deseo y una necesidad como es la educación, quiero decirles que son una fuente de inspiración y un valioso acto de voluntad, porque hacen una elección de vida que transforma para siempre sus existencias», prosiguió.
“La educación de adultos durante mucho tiempo estuvo relegada, sin embargo hoy en día se ha hecho muy visible la importancia de esta modalidad, cuyas acciones permiten satisfacer las aspiraciones de las personas, mejorando su condición de vida, dotando de conocimientos y capacidades, profundizando la formación para el trabajo y la vida, y promoviendo una formación en función del contexto y la realidad de cada estudiante», concluyó.
