Estaba prófugo desde principios de septiembre. Si bien habría unas seis denuncias formales, los clientes estafados serían más de una docena. El imputado fue detenido en Sierra Grande y una comisión policial viajaría hoy para trasladarlo a La Pampa.
Luego de permanecer prófugo casi tres meses, un empresario santarroseño fue detenido hace unos días en Sierra Grande (Río Negro) y entre hoy y mañana sería trasladado a nuestra provincia para afrontar media docena de imputaciones por presuntas estafas, publicó el diario La Arena.
A principio de septiembre, el empresario fue denunciado por varias personas que pagaron por contratos con su empresa de catering pero nunca recibieron los servicios prometidos.
Fuentes judiciales confirmaron que “las investigaciones realizadas permitieron constatar que el imputado estaba residiendo en Sierra Grande y la Fiscalía de Delitos Económicos, a cargo de Guillermo Sancho, extendió la orden de detención que permitió su captura el jueves por la noche”.
Añadieron que “ya se inició el trámite de extradición y durante la jornada del lunes una comisión policial viajaría a Río Negro con la misión de traerlo a nuestra provincia”.
Una vez en territorio pampeano, el imputado “será formalizado y enfrentará la primera audiencia indagatoria correspondiente a la investigación preliminar”.
Según fuentes policiales, el empresario “se habría asentado inicialmente en un establecimiento rural del oeste bonaerense, pero cuando advirtió que la policía tenía identificado su lugar de residencia luego se trasladó a Río Negro, donde también tiene familiares”.
En las últimas semanas, los investigadores recibieron datos certeros sobre su ubicación exacta y promovieron su detención.
Estafas millonarias.
La justicia pampeana había librado la orden de captura sobre el sospechoso el 6 de septiembre, tras recibir varias denuncias de personas estafadas mediante contrataciones no cumplidas de su servicio de catering.
“Hay seis denuncias similares, provenientes de personas que pagaron por un servicio de catering pero cuando llegó la fecha pactada el servicio no fue prestado” informaron en aquel momento desde la fiscalía a cargo de Natalia Urruti.
Según fuentes judiciales, las denuncias involucraban “presuntas estafas por unos cinco millones y medio de pesos”, aunque los damnificados “podrían ser muchos más, por lo cual estamos aguardando que se presenten nuevas denuncias”
A pedido de la fiscalía, el juez de Control firmó la orden de detención, aunque los investigadores ya sabían “que el hombre no se encuentra en su domicilio ni en lugares que habitualmente frecuentaba, por lo cual estimamos que abandonó la ciudad y posiblemente esté fuera de la provincia”. Además, la justicia “bloqueó todas las cuentas bancarias que figuraban a su nombre” para dificultar su permanencia como prófugo.
Entre sus presuntas víctimas se constató que una pareja lo contrató para que abasteciera su fiesta de casamiento y le pagaron “900 mil pesos por adelantado”, mientras que un hombre pagó 1.600.000 pesos “por el servicio de catering para el festejo de 15 años de su hija”. En ambos casos “el empresario no prestó el servicio y desapareció con el dinero”, según las denuncias radicadas por los damnificados en la Seccional Sexta.
