Cristina Kirchner designó a las autoridades del Senado que la acompañarán por cuatro años y creó la Dirección de atención ciudadana y documentación, con la misión de logar una «mayor transparencia y cercanía» con la población.
Así lo indica la disposición 342, una de las 14 firmadas este jueves por la vicepresidenta para cubrir el organigrama de la Cámara alta, que al igual que las autoridades políticas ocupará con militantes de La Cámpora y figuras afines al kirchnerismo en los últimos años.
La dirección de atención ciudadana es por ahora la única nacida en la gestión Cristina, dependerá directamente de ella y estará a cargo de Verónica Galeano, nombrada con la categoría A1 del Senado, con uno de los salarios más altos del personal.
Algunas de sus tareas serán las de «entender en la recepción, clasificación, seguimiento, derivación y respuesta de consultas, peticiones y propuestas de los ciudadanos y ciudadanas con respecto al trabajo legislativo como al funcionamiento de la diferentes dependencias del Senado».
Deberá además propiciar convenios con instituciones públicas y privadas, diseñar modelos de gestión para facilitar el acceso a información del ciudadano y examinar los niveles de atención y cumplimiento
También deberá centralizar los canales de atención y recopilar la información de las actividades del Senado para que sean de fácil acceso. Y presentar informes semestrales sobre las tareas de la Cámara.
La joven Galeano no aumentará la estructura del Senado porque Cristina eliminó la dirección general de iniciativas de Futuro, creada por Michetti para evaluar con especialistas el impacto de la revolución tecnológica.
“LUCHY” CON AMPLIAS FACULTADES
En otra disposición, delegó en la flamante secretaria administrativa María Luz Alonzo amplias facultades sobre el personal. Podrá nombrar, remover, recategorizar, asignar funciones, aceptar renuncias y hasta definir la baja de los empleados.
La ex diputada pampeana y militante de La Cámpora también podrá intervenir en todos los procedimientos de contrataciones, autorizar el llamado a concursos y «dictar normas aclaratorias y complementarias que resultaren necesarias para el funcionamiento».
El resto de la estructura del Senado tiene a figuras de confianza de Cristina, como la directora general de auditoría Susana «Mimi» Baum, cercana a Osar Parrilli.
Nelson Periotti fue nombrado Dirección General de Ceremonial, Protocolo y Audiencias. Su padre homónimo fue director de Vialidad durante los doce años de kirchnerismo y está procesado junto a Cristina en la causa que investiga por presunta administración fraudulenta.
Graciana Peñafort, abogada de Cristina en el caso Nisman y recordada por su defensa a la ley de Medios ante la Corte Suprema de Justicia, será directora de Asuntos Jurídicos del Senado.
Y Franco Vitali, de La Cámpora y viceministro de Cultura en la última presidencia de Cristina, dirigirá esa área en la Cámara alta. El director de Relaciones Internacionales del Senado será Gustavo Sabino Vaca Narvaja, hijo de Fernando Vaca Narvaja. Tuvo mucho trabajo esta semana, con la recepción de delegaciones de Rusia, China y Cuba.
El abogado platense Mariano Lovelli será director general. Su centro de estudios, CEPIS, se ganó la fama por anular el primer aumento de gas de Mauricio Macri, dispuesto por Juan José Aranguren en su recordada planilla de Exel.
El director general de Recursos Humanos será Miguel Villagra, camporista de La Pampa como su jefa Alonso. Hernán Reibel es director de comunicación y el de administración será Ricardo Angelucci, un funcionario con subas y bajas en el kirchnerismo.
Cuando era gobernador Felipe Solá lo tenía como director en el Marcado Central pero se fue peleado con Guillermo Moreno. Julián Domínguez lo reclutó como funcionario de Diputados y esa experiencia parlamenaria la volcará con Cristina. Que ya armó su equipo.