El gobernador de Mendoza, Rodolfo Suárez, desoyó el masivo rechazo al uso de las sustancias tóxicas para la megaminería y promulgó este martes la ley que habilita el empleo de cianuro y ácido sulfúrico para la extracción de minerales. Ayer miles de ciudadanos y asambleístas de esa provincia se habían movilizado para reclamarle que diera marcha atrás con esa decisión y fueron reprimidos.
La actividad minera en Mendoza estaba limitada desde 2007. Sin embargo, días atrás la Legislatura provincial aprobó cambios a la ley 7722, que regulaba esa industria, y abrió la puerta a la megaminería a partir de la utilización de sustancias químicas como cianuro, ácido sulfúrico y otras similares.
La ley que modifica las regulaciones para la extracción minera es la 9209 y apareció promulgada en el Boletín Oficial de Mendoza este martes 24 de diciembre. En medio de las protestas que se replicaron más allá de la provincia en todo el país, se especuló con la posibilidad de que Suárez dejara pasar los días para que las modificaciones a la ley 7722 se promulgaran automáticamente. La decisión del gobernador de promulgarla a menos de 24 horas de la marcha que desde distintas ciudades mendocinas llegó a la capital provincial para pedirle que vetara los cambios es todo un gesto político.
El gobernador mendocino les dio así la espalda a los más de 50 mil mendocinos que se movilizaron hasta la Casa de Gobierno provincial. Esa marcha “en defensa del agua” fue la definida como la «más grande de la historia de Mendoza».
La actitud del mandatario radical no sorprende: ayer no estuvo presente en la Casa de Gobierno, donde los asambleístas entregaron un petitorio que fue rechazado. El rechazo dio lugar a protestas por parte de los manifestantes y la policía mendocina respondió con represión.
Para hacer frente a las críticas, Suárez lanzó una campaña pública en defensa de la apertura de la provincia a la megaminería. A través de la cuenta oficial del gobierno de Mendoza afirmó que «la reactivación de la minería moverá recursos por alrededor de 349.234 millones de dólares» y «que la actividad pueda generar 17.550 puestos de trabajo durante la etapa de construcción de 6 proyectos».