Uno de los hombres más ricos del mundo volvió a manifestarse de manera categórica contra la concentración de la riqueza. Bill Gates, el creador de Microsoft, aseguró que “mi fortuna de 109 mil millones de dólares demuestra que la economía no es justa” y pidió a la administración de Donald Trump que aumente los impuestos a las grandes fortunas. Gates no dudó en afirmar que “he sido recompensado de manera desproporcionada por el trabajo que he hecho”.
El magnate, que se dedica a la filantropía junto a su esposa Melinda, es la segunda fortuna del mundo, solamente superado por Jeff Bezos, el creador de Amazon. Hace una década, el matrimonio Gates creó The Giving Pledge, un programa por el cual donarían la mayor parte de su fortuna. Con los años se sumaron otros multimillonarios, como Warren Buffett. Así, los Gates donaron desde 2010 cientos de millones de dólares para la lucha contra la pobreza. Al mismo tiempo, su patrimonio se duplicó, en gran medida, por las políticas fiscales norteamericanas, contras las que se acaba de pronunciar en su blog.
“Fui recompensado desproporcionadamente por el trabajo que realicé, mientras que muchos otros que trabajan igual de duro luchan por sobrevivir”, escribió el multimillonario, quien sostuvo que “estoy a favor de un sistema de impuestos en el que, si tienes más dinero, pagas un porcentaje más alto en impuestos”. Así, manifestó que cree que “los ricos deberían pagar más de lo que pagan hoy y eso nos incluye a Melinda y a mí”.
Gates escribió su propuesta en una nota titulada «En qué pienso en esta Nochevieja», al despuntar 2020. “Entiendo que el gobierno de los Estados Unidos simplemente no aporta suficiente dinero para cumplir con sus obligaciones. Este no es un juicio de valor, es solo un hecho. El gobierno recauda alrededor del 20 por ciento del PBI en impuestos mientras gasta alrededor del 24 por ciento. Y el costo de los compromisos está subiendo”, afirmó y se mostró favorable a un régimen fiscal para fundaciones como la suya, porque “la filantropía es buena en la gestión de proyectos de alto riesgo que el gobierno no puede asumir y las grandes empresas no quieren hacer”.
En ese sentido, remarcó que “Melinda y yo creemos que impulsar el progreso es el principal propósito de la riqueza” y que “antes de casarnos, decidimos que usaríamos los recursos de Microsoft para mejorar la vida de las personas”, dado que “nuestra riqueza viene con la obligación de retribuir a la sociedad”.
Por eso, “en 2020, nos comprometemos a seguir cumpliendo con esa obligación: a través de nuestros impuestos, nuestra fundación y nuestras donaciones personales”.
El sacerdote brasileño Leonardo Boff, una de las voces de la Teología de la Liberación, saludó la postura del creador de Microsoft. “Bill Gates le da la razón al Papa Francisco, que siempre asegura que la economía es el principal factor de la injusticia social mundial, sinónimo de profunda desigualdad», afirmó.