El triunfo electoral de la candidata de Cambiemos, Mónica Curutchet, le permitirá –desde el 10 de diciembre- ser la primera mujer que se sentará en el sillón de la calle Padre Durango, para regir los destinos durante los próximos cuatro años en la comuna de Eduardo Castex. ¿Cuáles son los desafíos que enfrentará?, ¿Cómo “consensuará” entre los fanatismos y la moderación?, ¿Qué perfil tendrá el gabinete? y fundamentalmente ¿Cuáles serán las primeras medidas para concretar el slogan electoral de un Eduardo Castex “en marcha”?.
Poner énfasis que Mónica Curutchet será la primera mujer que gobernará en Eduardo Castex, es un dato estadístico para una localidad de más de 110 años. Y ese no es un detalle menor para los nuevos tiempos del denominado “empoderamiento femenino”. Pero, solamente eso.
La jefa comunal electa no deberá realizar ningún gesto o afting para demostrar personalidad. Curutchet tiene una fuerte personalidad. Y ya la demostró cuando anticipó que sería candidata a intendenta y se presentó a una interna representando a un partido regido –en estos tiempos neoliberales- por lineamientos conservadores, donde trazan alianzas y apoyan políticas económicas nacionales que son retrogradas y perjudiciales para la gran mayoría de la sociedad argentina.
Inicialmente tendrá que lidiar entre los fanáticos y los moderados. Aquellos que en medio de los festejos frente al Comité de la UCR, aun teniendo responsabilidades institucionales, comenzaron con los canticos “¡Que se vayan todos!” o el más vigente “¡Si se puede!” que identifica plenamente al macrismo, y se coló “al aire” en la cobertura electoral de Radio DON 101.5 Mhz. En este grupo radicalizado reinan los acusadores sin denuncias hacia los dirigentes del actual oficialismo, y no perciben que compartieron la lista sábana con candidatos a legisladores provinciales que se tuvieron que bajar y otros que no saben cómo hacer para asumir.
La armonía social será el primer obstáculo que enfrentará el tercer gobierno radical desde la reinstauración de la democracia: las anteriores gestiones fueron encabezados por Luis Ordoñez –en dos oportunidades- y Juan Chiquilitto –que ahora regresa a la viceintendencia castense-. No experimentar una grieta “a la castense”, será el primer paso. Y no resultará un detalle menor.
PRIMERA SEÑAL
“No vamos a tocar la planta municipal, a pesar de lo que dicen, esto no va a pasar. Lo que si vamos a hacer, es organizarla y mejorar las condiciones de contratación”, posteó –cuatro días antes de los comicios- Mónica Curutchet en su perfil en las redes sociales.
Esto puede interpretarse con una primera contribución a la armonía social. Diferenciar los “contratos laborales” de los “contratos (para los) políticos” no será una tarea difícil, dado que hace ocho años permanece en el recinto legislativo local controlando los legajos municipales.
Hoy la situación es distinta a 1999 cuando asumió Luis Ordoñez en la comuna castense. En aquella época el primer gobierno radical llegó a la comuna derrotando en las urnas a un sector del PJ que había provocado un caos institucional, donde se había instalado un “co gobierno” entre algunos funcionarios y personajes que llevaron las arcas municipales a la ruina. Hoy no funcionaría “el castigo del cementerio” para los trabajadores municipales identificados con el actual oficialismo, que si se aplicó en 1999. Aunque sería bueno ver a algunos empleados municipales trabajar, quienes se han colgado de la personería jurídica de algún gremio para no desempeñar tarea alguna.
Cuando asumió Julio González en 2011 ya no se procedió de esa manera. Y tanto Ordoñez como González respetaron los nombramientos en planta permanente de empleados (mayoritaria o exclusivamente) vinculados con los partidos políticos que estaban al frente de la comuna, como ocurrió durante el gobierno de Adolfo Sala y también en la gestión de Juan Chiquilitto.
GABINETE
Hasta el momento se confirmaron solamente dos funcionarios que integrarán el gabinete de Mónica Curutchet. Una técnica: Raquel Resler en Recursos Humanos; el otro cargo político es para Carlos Erro, quien fue el encargado del Parque Automotor municipal de los gobiernos radicales. Hay fuertes versiones que regresarían algunos funcionarios de Chiquilitto y otros serían del “gusto político” de Curutchet. “Un mix entre experiencia y nuevos, pero todos con muchas ganas de trabajar”, aseguran. “La prioridad es que tengan ganas de trabajar”, aseguran algunas fuentes que frecuentan el edificio ubicado en el cruce de calles Leandro N. Alem y Arturo Illia.
El éxito del gabinete estará relacionado con las políticas y proyectos que se lleven adelante. Quizás una convocatoria a quienes encabezaron las distintas listas –en las elecciones internas y generales- sería una medida adecuada. Escuchar cuales y porque surgían algunas propuestas, puede ser un aporte valioso a la gestión. El PRO fue quizás la agrupación que más proyectos había elaborado para participar en las internas de Cambiemos. Proponía varias iniciativas que serían viables y positivas para la comunidad: playa de estacionamiento para camiones, reestructuración de la Planta de Reciclado, la formación de una empresa municipal de realización del tendido de la red de gas natural (NdR: por estos días la comuna de Ingeniero Luiggi tuvo que contratar a la cooperativa de Trenel para realizar trabajos que permitan conectar al Centro de Rehabilitación Neurológico), digitalización de la comuna para controlar la circulación y gastos de los vehículos municipales, entre otros.
VENTAJAS Y DESVENTAJAS
Curutchet tendrá un inicio de gestión con algunas ventajas muy valiosas en el plano local, pero también desventajas externas. Entre las ventajas, no es un dato menor que tendrá la infraestructura necesaria para no tener que realizar inmediatamente grandes inversiones: la red cloacal está llegando a cubrir toda la zona urbana, el cordón cuneta se construyó y hay un convenio con APA para construir 4 kilómetros en los próximos meses; el Centro Cultural Municipal tendrá finalizada la primera etapa; se ampliaron las instalaciones del Centro de Desarrollo Infantil; los establecimientos educativos ya cuentan con la pavimentación para que alumnos y niños lleguen a clases sin dificultades; el Parque Automotor está en condiciones; y la Travesía Urbana se finalizó.
Pero, en la otra vereda está la crisis económica provocada por las políticas económicas nacionales, que incrementaron notablemente la demanda social. La suba de las tarifas, los aumentos de los alimentos y las pocas posibilidades de insertarse en la actividad laboral privada, provocan que el municipio tenga que paliar esa problemática, que trasladado a costos económicos representan un importante porcentaje del presupuesto de la comuna.
“CASTEX EN MARCHA”
Este fue el slogan de campaña que motivó a los vecinos para brindar el apoyo a los candidatos de Cambiemos. Y el primer paso sería analizar con el gobernador electo Sergio Ziliotto la viabilidad de poner en marcha el Frigorífico de Pequeños Animales, para generar mano de obra y dinamizar la economía regional.
Ahora, los pasos posteriores de lo que propagandísticamente denominan poner “en marcha” a Eduardo Castex, estará muy relacionado con la capacidad de los funcionarios, pero también con la marcha de la economía nacional que será determinante para el próximo período de gobierno. La mesura tendría que ser culto para la próxima intendenta, porque la generación de expectativas desmedidas puede provocar desazón en el electorado, por motivos ajenos a su incumbencia como son las políticas económicas nacionales que también repercutirán en una población como Eduardo Castex.
(*) Por Coclete Rosa