Un grupo de personas fue detenido por organizar una fiesta, entre quienes se encontraban dos choferes de ambulancia del 107 y una enfermera de terapia intensiva de un centro de salud. El hecho ocurrió el viernes pasado en una casa del barrio Lola Mora, de la ciudad de San Miguel de Tucumán. El número de invitados superó ampliamente lo permitido.
Desde el 8 de junio pasado, en Tucumán están autorizados los encuentros sociales en lugares cerrados pero de hasta 10 personas como máximo. Además, en cada reunión no se debe superar la ocupación del 50% de la capacidad del lugar.
Según informó el diario La Gaceta, un vecino llamó al 911 y alertó a las autoridades sobre el festejo, que tenía lugar en la esquina de Guatemala y Lola Mora. Cuando los efectivos de la policía provincial llegaron, se encontraron con música alta, gritos y alrededor de una decena de autos estacionados afuera. Al tocar el timbre, una mujer los atendió y explicó que se estaba festejando el cumpleaños de su hijo.
Los agentes se comunicaron con la Fiscalía de Delitos Complejos, desde donde se ordenó la aprehensión de todos los asistentes a la fiesta, así como el secuestro de la totalidad de los vehículos. Luego del aviso, al lugar también se acercaron efectivos del Grupo de Infantería Capital.
«Se puso a disposición de la justicia a 17 personas, a las que se le aplicó el artículo 205 y 239 del Código Penal, por violar la cuarentena», explicó Ricardo Fresneda, Comisario a cargo del operativo, en diálogo con TN.