En medio de las restricciones por la pandemia del coronavirus, se multiplican las fiestas clandestinas. Durante la madrugada de este domingo, policías e inspectores municipales de Catriló irrumpieron en el bar Apolo, donde constataron que se desarrollaba una fiesta clandestina.
El bar -ubicado en Viale y España- fue clausurado, confirmó el jefe de la Unidad Regional Uno, Guillermo Torres, al ser consultado por Diario Textual. «Según los reportes, había una fiesta clandestina», sostuvo. «Fue clausurado en forma preventiva por la municipalidad», agregó.
Según dijo el comisario, se les abrió una causa penal a 36 personas en el marco del artículo 205 del Código Penal. «Será reprimido con prisión de seis meses a dos años, el que violare las medidas adoptadas por las autoridades competentes, para impedir la introducción o propagación de una epidemia», indica ese artículo.
En La Pampa -que se encuentra en la fase de distanciamiento social-, los bares pueden funcionar hasta las 0 horas bajo un estricto protocolo.