Durante un amplio operativo que demandó varias horas un grupo de operarios desenterró, desenterró una importante cantidad de bidones de herbicidas, algunos llenos y otros vacíos, en un terreno paralelo a las vías del ferrocarril, entre las localidades de Vértiz y Ojeda. La investigación se inició a partir de una denuncia anónima en la Dirección de Agricultura, que luego se comunicó la subsecretaria de Ambiente de La Pampa.
Varias horas después del operativo la fiscala Verónica Campo ordenó allanar algunas instalaciones de la empresa Ferroexpreso Pampeano, responsable de los terrenos donde estaban enterrados los envases. Además de secuestrar elementos importantes para la causa, fueron demoradas tres personas, informaron las fuentes policiales, publicó el diario La Arena.
En el lugar estuvo Fabián Tittarelli, subsecretario de Ambiente de la provincia, junto a los fiscales Verónica Campo y Armando Agüero, personal de la Brigada de Investigaciones y efectivos policiales de Vértiz y Ojeda.
Los bidones fueron encontrados en un predio lindero a las vías ferroviarias, junto a un camino vecinal ubicado a 15 kilómetros de Vértiz, cerca de la ruta provincial 101. Estaban enterrados en una franja de unos 30 metros de largo por 4 metros de profundidad y los investigadores presumen que por la gran magnitud y profundidad del pozo habrían utilizado máquinas viales para hacer el trabajo.
ENTERRADOS
En el lugar del hallazgo la fiscala Verónica Campo explicó que fue necesario trabajar con máquinas aportadas por las comunas de Vértiz y Alta Italia para desenterrar los bidones, algunos llenos y otros vacíos.
Al terminar estos trabajos pudieron comprobar que la importante cantidad de bidones de herbicidas habían sido descartados allí. Según Campo, como los bidones se encontraron «enterrados completamente» a una profundidad de cuatro metros el trabajo debió realizarse con alguna maquinaria.
La funcionaria también adelantó que la investigación judicial se enfocará en descubrir la identidad de los responsables y consideró que resulta un incidente muy grave.
Además de secuestrar y etiquetar todos los elementos desenterrados, se tomaron muestras de agua y de suelo para determinar el nivel de contaminación provocado por el enterramiento.
El terreno donde estaban enterrados los envases desechados se encuentra a cargo de Ferroexpreso Pampeano y la denuncia ante la Subsecretaría de Ambiente habría sido realizada por el propietario de un campo vecino.
Si bien los bidones descartados fueron utilizados hace mucho tiempo, habían sido enterrados hace apenas unos días, calculaban los funcionarios.
Los envases se corresponden con distintos herbicidas, incluyendo glifosato, así como otros productos y coadyuvantes (suelen utilizarse aceites que el principio activo tenga mayor eficacia).