Un menor fue declarado autor y responsable penal del delito de creación de una situación de peligro para la vida o la integridad física de las personas, mediante la participación en una prueba de velocidad o destreza de vehículo con motor sin la debida autorización legal.
El hecho ocurrió el 6 de octubre del año pasado, a la tarde y en General Pico, cuando el imputado tenía 17 años. Él circulaba solo en una moto Honda, modelo Titán, junto a otro rodado similar guiado por un hombre de 28 años. Ambos «participaron de una prueba de velocidad y destreza, recostados arriba de las motos y desplazándose excedidos en los límites de velocidad permitidos», señala la sentencia dictada por la jueza de control piquense, María Jimena Cardoso.
«Concretamente –añade el fallo– ambos motoristas realizaron maniobras de aceleración y desaceleración» mientras se desplazaban por la avenida Brunengo en dirección sur a norte hasta el semáforo de calle 319. En ese trayecto sobrepasaron a un móvil policial, cruzaron un semáforo en rojo, retomaron por la colectora y nuevamente por Brunengo circularon «a velocidad elevada», esta vez en dirección norte a sur.
El conflicto penal se resolvió a través de un juicio abreviado, acordado entre el fiscal Guillermo Komarofky, el defensor general Alejandro Piñeiro y el propio acusado, quien admitió la autoría del delito. También dieron su conformidad la madre del menor y el asesor de Niños, Niñas y Adolescentes, Fabián Allara.
Con respecto al otro motociclista, a principios de julio fue sobreseído por extinción de la acción penal al otorgársele por primera vez el beneficio del criterio de oportunidad y habiendo él ofrecido una reparación al Estado de 5.000 pesos. Esa propuesta fue aceptada por el Ministerio Público Fiscal.
Cardoso tuvo en cuenta, entre otras pruebas, el parte policial informando acerca del sobrepaso de las motos. Los uniformados realizaron filmaciones y los siguieron en forma «prolongada y minuciosa», dejando constancia que evitaron una persecución a fin de preservar la integridad física de los propios conductores y del público en general. También valoró fotos publicadas por los propios protagonistas en la red social Instagram.
Finalmente, la magistrada dispuso en la parte resolutiva de la sentencia informar de la declaración de autoría y responsabilidad penal al Juzgado de Familia, Niños, Niñas y Adolescentes a los fines del tratamiento tutelar pertinente.