viernes 29, noviembre, 2024, Eduardo Castex, La Pampa

Las historias de las nuevas víctimas pampeanas de la represión (*)

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Entre las 15 víctimas pampeanas del Terrorismo de Estado antes y durante la dictadura militar incorporadas por el gobierno de La Pampa al registro provincial, rescatamos 6 historias: otra víctima del represor Vergéz, un padre asesinado junto a sus dos hijos, el alfabetizar en un barrio popular secuestrado y el compañero de otra víctima pampeana de los grupos de tareas de Berisso.





Alonso: otra víctima de Vergéz

Severino Alonso nació en La Maruja el 6 de marzo de 1932 y fue secuestrado y desaparecido junto a su pareja María Ana Catalina Testa el 8 de enero de 1976 en el barrio Iponá de Córdoba capital. Tenían tres hijos de 3, 5 y 10 años.

Alonso era metalúrgico (técnico mecánico) y suboficial retirado de la Armada. Militante del peronismo revolucionario y católico, trabajaban junto a su pareja, que era docente y psicóloga, en las villas y asesoraban a sindicatos como el de servicios domésticos. Alonso fue secuestrado una noche antes del golpe militar del 24 de marzo de 1976 junto a otros 17 militantes por la patota de la Triple A. Su caso fue juzgado en la Megacausa La Perla que tuvo como entre los represores acusados al pampeano Héctor Pedro Vergéz. Severino tenía 43 años y fue visto en el CCD La Ribera antes de su asesinato, indica la Comisión Provincial de la Memoria de Córdoba. Vergéz calificaría esa operación como “Moncholos”, expresión despectiva para referirse a militantes montoneros.

Bolzán: una casa baleada con tres niños en su interior

Bernardo Pablo Bolzán nació el 18 de enero de 1939 en La Pampa. Era empleado de la Municipalidad de San Martín y fue secuestrado a los 39 años el 20 de enero de 1978 en su domicilio de  Wenceslao Tata 4821 en Caseros, en el partido de Tres de Febrero, junto a su esposa Olga Haydeé Pini, empleada de ENTEL. Ambos eran militantes de la Juventud Peronista.

Una patota baleó el frente de la casa y capturaron a Bolzán y Pini que no ofrecieron mayor resistencia. La pareja tenía tres hijos de 4 meses, 4 y 8 años que estaban en el interior y quedaron en casa de una vecina.

Estuvo secuestrado en El Campito (CCD de Campo de Mayo) y su caso fue incluido en la causa judicial que lleva el nombre de Santiago Omar Riveros en la que se investigaron, probaron y condenaron delitos de lesa humanidad. La sentencia fue dictada en mayo de 2010 por el TOF 1 de San Martín.

Ramos: alfabetizador en un barrio de Rosario

Mario Alberto Ramos nació en Santa Rosa el 11 de noviembre de 1946. El 17 de septiembre de 1977 fue secuestrado en un operativo ilegal en la vía pública en Rosario. Tenía 30 años.

Era empleado y estudiante universitario de Psicología en la Universidad Nacional de Rosario y militaba en la Juventud Universitaria Peronista. Tenía 4 hijos. Fue visto en el CCD Quinta de Funes.

En el barrio donde vivía y militaba, denominado Cabín 9, alfabetizaba a las y los vecinos. Otros tres compañeros que habían montado la casilla donde iban los vecinos también fueron secuestrados y asesinados. En el lugar se creó después la escuela Nº 1209 «Provincia de Chaco» y se pintó un mural hace pocos años. En esos mismos días, otros 14 militantes del grupo fueron secuestrados y desaparecidos.

Rayson: el compañero del Pampa De Laturi

Daniel Rayson nació el 4 de enero de 1952 en General Pico donde vivió parte de su infancia. Su padre era militar y cuando tenía 7 años se mudaron a Berisso, Buenos Aires, de dónde era oriunda la familia paterna.

Rayson estudiaba Ingeniería en la UCA y trabajaba en la empresa Propulsora Siderúrgica de Ensenada, y estaba por casarse. En esa industria era compañero de otro pampeano, también asesinado por los grupos parapoliciales de la Triple A, Salvador “Pampa” De Laturi.

Fue secuestrado el 19 de febrero de 1976 a las 2.30 horas a los 24 años de su domicilio en Calle 171 entre 16 y 17 de Berisso durante un allanamiento realizado por el grupo parapolicial de Concentración Nacional Universitaria, integrado por unos diez hombres que dijeron ser “policías”, donde vivía con su madre y su hermana.

Fue asesinado en un camino de tierra vecinal a la altura del kilómetro 61 de la ruta provincial 215 en el partido de Brandsen. Junto a él también fue ejecutado otro obrero, Alcides Emilio Méndez Paz, dirigente sindical de Río Santiago y estudiante, que había sido liberado pocos días antes luego de una detención de varios meses.

Videla Yanzi: un padre asesinado junto a sus dos hijos

Jorge Enrique Videla nació en General Pico el 18 de enero de 1925. Vivió en San Juan, estudió en Capital Federal, se radicó en Entre Ríos y finalmente en Mar del Plata. En la ciudad balnearia fue asesinado por la Tripla A junto a sus dos hijos Jorge y Guillermo, el 21 de marzo de 1975.

Su hija Beatriz Videla recuerda: “Mi abuelo era médico sanjuanino y estaba en esa época en General Pico donde nació papá. Cuando era chico se trasladó a San Juan y después, como a los 14 años lo manda su padre a hacer el Liceo Militar a Buenos Aires”. Videla llegó a ser teniente primero del Ejército, hasta su retiro efectivo a los 20 años. “Le dan de baja porque insultó a un superior, no aguataba más y tuvo un cruce con un superior”, indica su hija.

En Buenos Aires conoció a quien sería su esposa, Beatriz Hoogen, y se traslada a Villaguay donde vivía la familia de ella. Allí fue productor rural y nacieron sus hijos. Pero cuando los negocios le fueron mal decidió trasladarse a Mar del Plata en 1965.

En 1975 su hijo mayor, Jorge Lisandro “Coque”, tenía 22 años y militaba en la JP. Jugaba al rugby en Nacional-Nogales RC de Mar del Plata y cursaba en la Universidad Nacional de Mar del Plata, además trabajaba. Beatriz era la del medio, tenía 20 años, militaba en la JP y se había casado. Su hijo menor, Guillermo “Patota” tenía 16 años, era rugbier de Comercial Rugby Club y Nacional-Nogales RC de Mar del Plata. Cursaba quinto año en el Colegio Nacional Mariano Moreno y había asumido su compromiso estudiantil en la Unión de Estudiantes Secundarios (UES).

Su asesinato, el de sus dos hijos y el de un sobrino, es conocido como la “Masacre del cinco por uno”. El hecho fue parte de la represalia de los grupos paramilitares de CNU-Triple A tras la muerte del jefe de la CNU Ernesto Piantoni, muerto el 20 de marzo de 1975. Durante la noche de su velatorio, según se indica en el juicio realizado en esa ciudad, fue cuando se decidió una serie de crímenes de acuerdo con la fórmula «Cinco por uno» que se cometieron.

La Asamblea Permanente por los DDHH de Mar del Plata indica que a las 2.30 del 21 de marzo, a horas del sepelio de Piantoni, un grupo armado irrumpió en la vivienda de los Videla en España 856. Su sobrino, Enrique “Pacho” Elizagaray, hijo del senador provincial del Frejuli Carlos Elizagaray y referente de la Juventud Universitaria Peronista (JUP) estaba esa noche en la casa. Cuando llegó el grupo armado, intentó escapar por los techos, pero una ráfaga de balas lo alcanzó y murió de inmediato, tras recibir 23 impactos. Jorge Enrique Videla y sus hijos Jorge Lisandro y Guillermo Enrique fueron subidos a los autos que esperaban en la calle.

Sus cuerpos fueron hallados en el paraje Monte Mar en los terrenos adyacentes a la intersección de la calle de acceso al barrio Nº 176 y 54 (Madame Curie). Jorge Videla tenía 33 heridas de bala, su hijo Jorge Lisandro tenía 57 y su hermano Guillermo 27. Fueron reconocidos en el mismo lugar por el senador provincial Carlos Alberto Elizagaray, padre de la cuarta víctima.

El 20 de diciembre de 2016 el Tribunal Oral en lo Criminal Federal de Mar del Plata condenó a los integrantes del grupo de tareas por los cinco asesinatos.

Zubur: el secuestro de toda una familia

Marcos Bernabé Zubur nació el 10 de junio de 1932 en Santa Rosa. Fue secuestrado a los 44 años de su domicilio en Barrientos 6435 en González Catán, La Matanza, presuntamente el 5 de marzo de 1977, junto a su pareja Celia Llebeili, de 51 años, y toda la familia de ella.

Era radiólogo en Instituto de Cirugía de Haedo. Estudio en Santa Rosa hasta el secundario, mientras vivía con una abuela, y luego se trasladó al Gran Buenos Aires. De acuerdo a HIJOS de La Matanza, “todos ellos eran militantes del PRT/ERP. Irma y Celia Llebeili trabajaban en el Hospital Güemes en Haedo, al igual que Marcos Zubur, pareja de Celia. A su vez Marcos ejercía como radiólogo en el consultorio de Virrey del Pino del doctor Jairo Herrón. Allí también se desempeñaba Norma, quien estaba embarazada”. También secuestraron a otros tres miembros de la familia y posteriormente a un médico.

Su hermana relató que hacía trabajos sociales y sanitarios en una villa de González Catán junto a su pareja y afirmó que sus bienes fueron saqueados, por lo que se perdió toda documentación y fotografías de la víctima.

(*) Por Norberto G. Asquini (periodista e investigador)

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