Rivadavia de Arata perdió 2 a 1 con Atlético Catriló, en el partido de vuelta de la definición del campeonato de la categoría 1999 de Primera B de la Liga Pampeana de Fútbol, pero igualmente pudo festejar el título en las calles de la localidad norteña. La particularidad fue que se coronó campeón aun perdiendo los dos partidos definitorios, porque los catrilenses fueron sancionados por el Tribunal de Disciplina.
Los aratenses habían perdido el partido “de ida” por 4 a 2 en Catriló, pero el Tribunal de Disciplina le dio el partido ganado por 2 a 0, dado que Atlético Catriló incluyó mal un futbolista.
Este domingo, en el estadio aratense ganaron los catrilenses, pero no les alcanzó para revertir el resultado adverso que determinó el tribunal liguero, y los aratenses pudieron festejar con su gente en las calles y la sede social de la institución celeste.