El precandidato a senador nacional por la lista 502A Democracia y Consenso, Hipólito “Poli” Altolaguirre, cuestionó las expresiones del Presidente Alberto Fernández, donde aseguró que el cese de las exportaciones de carne supuso una baja del orden 2,3% en el precio al consumidor. «El Presidente se burla de los argentinos, no está en el día a día”, dijo el dirigente santarroseño.
“El Presidente exprime los números para justificar una medida que hizo agua por todos lados. No le sirvió ni a los consumidores, ni al campo y, además, ha generado pérdidas de puestos de trabajo y una merma en el stock ganadero. Celebra una baja mínima transitoria pero omite decir que el precio de la carne había subido, solo en junio, un 7,7%, momento en que esta disposición ya estaba vigente. El Presidente se burla de los argentinos, no está en el día a día” sentenció Altolaguirre.
“El cierre de las exportaciones de carne no funcionó cuando se implementó allá por 2006 y no es una sorpresa que no reporte resultados positivos ahora. Si el gobierno nacional sigue insistiendo con medidas cortoplacistas, continuará fracasando. La salida es exportar más, no menos”, recordó.
“Propiciar las condiciones para que se realicen inversiones, reglas claras, y que la Argentina recupere el rol exportador que alguna vez supo tener, pero agregando valor que redunde en oportunidades laborales para los argentinos. Si el país se desarrolla y crece, esas perspectivas se verán reflejadas en sus bolsillos. Hoy no alcanza ni para comprar un kilo de carne picada porque no se llega a fin de mes” afirmó Altolaguirre.
Sobre las razones que están detrás de los aumentos de la carne, Altolaguirre dijo que “los precios no bajan porque han aumentado repetidamente los combustibles y esos incrementos se trasladan directamente a la inflación repercutiendo en la góndola y en las carnicerías”.
“Pero hablamos de la carne como podríamos hablar de cualquier alimento, basta con recorrer comercios o supermercados para confirmarlo. Estamos en una situación donde no hay ganadores, pierden los consumidores, los comerciantes y también los productores. Si no comenzamos por reconocer la inflación, los precios seguirán subiendo indefectiblemente”, concluyó.
MÁS CRÍTICAS
El precandidato a senador nacional de Juntos Por El Cambio, Daniel Kroneberger, cuestionó que el gobierno nacional “le vive poniendo el pie encima al campo argentino». Y aseguró que con la aplicación del cepo a las exportaciones de carne, se registran caídas en la faena, la producción, el consumo y las exportaciones, pero los precios no bajan al consumidor.
El relevamiento del Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (IPCVA) reflejó que los precios de los distintos cortes al consumidor en el mercado interno registraron en comparación interanual incrementos de un 77,7%.
«La decisión de cerrar exportaciones, atrasa. No podemos cerrar mercados, no nos podemos dar el lujo de perder dólares por el cierre de exportaciones. El valor de la carne no bajó, se frenó la producción, se frenaron los rodeos”, dijo el ex legislador nacional.
Kroneberger aseguró que el cierre de las exportaciones de carne vacuna dejo en evidencia “en pocos meses” las consecuencias negativas. «Los costos son enormes, y debemos brindar como país, un escenario previsible, con reglas claras de juego, para las inversiones presentes y futuras. Argentina debe cumplir con los compromisos asumidos frente a los mercados internacionales. Es la única manera de generar confianza para nuestros inversores», dijo.
«Informes –continuó- de las entidades del agro, señalan un aumento del precio de la carne al consumidor del 18 por ciento en promedio entre marzo y junio, mientras que la inflación para los alimentos en ese lapso fue del 11 por ciento. Respecto al valor de las exportaciones el informe remarca que los embarques en junio cayeron 45 por ciento y que ingresaron 108 millones de dólares menos que en mayo»
Kroneberger detalló que este informe reveló que después de 135 días de políticas de esta índole, la cadena de ganados y carnes acumuló pérdidas por u$s 1.084 millones desde el pasado 15 de abril hasta la fecha, por una serie de medidas y resoluciones para intervenir este mercado. Es decir que por cada día el sector perdió u$s 8 millones.
“De acuerdo con la entidad, los productores asumieron el monto más grande de pérdidas con u$s 411 millones, mientras que en los frigoríficos las mismas alcanzaron los u$s 165 millones y los operarios tuvieron una merma en sus remuneraciones de u$s 59 millones. Por caída del efecto multiplicador de la actividad primaria se perdieron u$s 209 millones y u$s 240 millones exportaciones no realizadas”, agregó.
PERJUDICAR EL TRABAJO
La decisión de extender las trabas a las exportaciones de carne es perjudicar el trabajo y la economía de todos los argentinos, resaltó el ex intendente de Colonia Barón.
“Con estas decisiones del gobierno nacional, pierden todos los argentinos: consumidores, frigoríficos, trabajadores y productores. Y el Estado. Los únicos que celebran son los competidores de la región. Según el informe, a mediados de abril el productor argentino recibía por su novillo el mismo precio que su par uruguayo, hoy es un 20 por ciento menor. Mientras tanto, el precio de la hacienda en pie en Brasil experimentó un aumento desde mediados de abril del 29 por ciento”, expresó.
“Por el cepo a las exportaciones de carne que impuso el Gobierno, Uruguay volvió a superar a la Argentina en volumen de carne exportada en el mes de julio luego de 3 años, según demostró Fundación Mediterránea”, aseguró.
“El país vecino envió al exterior el mes pasado 37.939 toneladas, según datos del Instituto Nacional de Carnes (INAC) de aquel país, lo que generó divisas por 218 millones de dólares. Mientras que la Argentina alcanzó unas 35.611 toneladas, según los números del Indec, por un valor de 191 millones de dólares”, detalló.
No hay dudas que es una medida que va en contra del desarrollo y el crecimiento de la ganadería. No es una medida efectiva para bajar el precio de la carne. Eso ya quedó demostrado a lo largo del tiempo. Estas decisiones nunca acrecentaron la oferta para consumo local y así bajar los precios. Sino que redujeron la producción ganadera, concluyó.