En medio de la creciente tensión mundial por el conflicto en Ucrania, el Gobierno nacional reiteró su preocupación y llamado a la paz e insistió en que debe llevarse a cabo «un diálogo constructivo y de buena fe a fin de encontrar una salida pacífica y concertada».
Durante la 58ª sesión plenaria de la ONU, el representante permanente alterno de la Argentina ante el organismo, Fabián Oddone, sostuvo que el país «expresa su preocupación por el desarrollo de la situación generada en Ucrania».
«Nos alarma la crisis actual, así como la posibilidad de que esta se siga agravando. Es necesario dar pasos sustantivos para entablar un diálogo constructivo y de buena fe a fin de encontrar una salida pacífica y concertada», indicó.
También resaltó en su discurso: «Resulta esencial que todos los países nos apeguemos a los principios a los que hemos adherido como miembros de estas Naciones Unidas. En tal sentido, se deben redoblar los esfuerzos de acercamiento diplomáticos para aliviar tensiones y, al mismo tiempo, fortalecer el espacio de diálogo. No existe una solución militar en este asunto, por el contrario, debe primar la diplomacia preventiva y el diálogo como vía de distensión».
Por otro lado, agregó que «en este marco se apela a todas las partes involucradas a resolver sus diferencias a través del diálogo, con apego a los principios consagrados en la Carta de las Naciones Unidas y el derecho internacional, como el respeto a la soberanía de los estados, el no uso de la fuerza y el pleno respeto de los derechos humanos».
Además, Oddone añadió: «Nos sumamos al llamado del Secretario General a todos, de abstenernos de ´acciones y declaraciones que lleven a esta peligrosa situación a estar fuera de control´».
El Papa convocó a un ayuno mundial por la paz
En medio de la escalada del conflicto, el papa Francisco convocó a un ayuno por la paz para el próximo miércoles. «Quiero apelar a los que tiene responsabilidades políticas para que hagan un serio examen de conciencia frente a Dios, que es Dios de la paz y no de la guerra», indicó el Sumo Pontífice.
«A la insensatez diabólica de la violencia se responde con la armas de Dios, la oración y el ayuno. Animo especialmente a los creyentes a dedicarse intensamente a la oración y al ayuno ese día. Que la Reina de la Paz preserve al mundo de la locura de la guerra», precisó.